La afición del Sporting de Gijón ha vuelto a caer en el desánimo por el inicio del desarrollo del mercado de fichajes, marcado hasta ahora por la ausencia de fichajes y las salidas de dos referencias como Nacho Cases y la inminente de Iván Cuéllar. Esto ha neutralizado el efecto positivo que provocaron las llegadas de Miguel Torrecilla y Paco Herrera.
El Sporting sigue sin fichar más de un mes después de la llegada de su nuevo director deportivo, Miguel Torrecilla. En ese sentido, el vicepresidente Javier Martínez apeló a la paciencia durante el acto de presentación de la campaña de abonados, el mismo día en el que se produjo la salida de Cuéllar al Leganés a falta de confirmación oficial. La segunda ya tras la de Nacho Cases tras 21 años vistiendo la camiseta rojiblanco. Y la próxima será la de Jorge Meré.
A todo esto se ha unido la negativa del delantero Charles, por quien la entidad asturiana había hecho una apuesta notable en términos económicos. Un fichaje frustrado que ha demorado el anuncio de la primera cara nueva con vistas a la próxima campaña, en la que el Sporting partirá con el objetivo de conseguir el ascenso.
Sin embargo, en Mareo se mantiene la prudencia. El conjunto gijonés no es el único de Segunda que de momento no se ha reforzado. No lo ha hecho porque Torrecilla apunta alto, además de determinadas ofertas rechazadas y sobre todo porque el club ha priorizado las salidas para acudir con garantías al mercado. No se quiere repetir el ejercicio del verano pasado, cuando el Sporting se apresuró fichando sin garantías.
La consigna estos meses, en cambio, pasa por acertar con los refuerzos. Para ello, el Sporting quiere aclarar sus posibilidades económicas y fichar jugadores que verdaderamente eleven el nivel de la plantilla. La espera merece la pena, se piensa en las oficinas de Mareo.