El padre Fernando Fueyo era un miembro más de la plantilla y el cuerpo técnico del Sporntig de Gijón. La llegada de Rubi la temporada pasada al conjunto rojiblanco dejó fuera de la institución al párroco, que llevaba vinculado al Sporting cerca de 20 años. Muy populares se hicieron esas imágenes de la plantilla rezando junto a él. Con la llegada de Paco Herrera a El Molinón, Fernando Fueyo volverá a ser el capellán del equipo.
En una entrevista realizada a La Nueva España, el párroco asegura que tiene permiso para volver al vestuario. "Herrera me dijo que podía volver a rezar al vestuario". El padre Fernando Fueyo fue un personaje muy querido dentro de la plantilla, para los jugadores era uno más de ellos. "Varios jugadores vinieron a decirme que lo sentían y algunos de ellos seguían rezando el padre nuestro por su cuenta".
El clérigo tuvo palabras de cariño para Rubi, el técnico que le sacó del Sporting. "Me dio pena porque Rubi es muy buen paisano y tengo una buena relación con él".