El mercado de fichajes del Sporting estuvo marcado, entre otras cosas, por las numerosas salidas. Entre otros, Iván Cuéllar abandonó la portería seguir jugando en Primera División y el club decidía no fichar a ningún meta, pues confiaba su seguridad defensiva a Mariño y Whalley daría un paso más en la primera plantilla.
Cuatro partidos después, los números avalan la confianza de la dirección deportiva en Diego y Óscar. El meta gallego está llamado a ser el titular durante esta campaña y de momento ha respondido a la perfección, pues no ha encajado ni un sólo gol en los tres partidos de Liga disputados, lo que convierte al Sporting en el equipo menos goleado de la categoría.
Este miércoles el turno era para Óscar Whalley, que debutaba un año después de su fichaje. Y el meta tuvo trabajo desde el principio, cuando el colegiado señaló un penalti a favor del Reus. El conjunto catalán lo falló, pero Whalley tuvo tiempo en la segunda mitad de demostrar su valía parando una nueva pena máxima. El meta maño también respondió en el campo y volvió a dejar la portería del Sporting imbatida.
En total, cuatro partidos oficiales sin encajar ni un sólo gol y 360 minutos sin batir la portería del conjunto asturiano, que ha demostrado que tenga quien tenga bajo palos tiene en la solidez defensiva una de sus principales virtudes.