El banquillo no fue solución

Paco Herrera reconoció las dificultades que tuvo el Sporting en la segunda parte. El técnico catalán trató de corregir la situación con la entrada de Álex Bergantiños y Carlos Castro, además de la tardía de Álex López por Michael Santos tras el empate del Oviedo. "El último cambio es anecdótico", dijo el técnico, explicando que cuando Álex López esperaba en la banda no quiso rectificar su decisión a pesar del tanto de Toché.

 
"Hice los cambios para tener el balón (...). No me arrepiento, si hubiera metido la pata lo diría". Herrera achacó el bajón de la segunda parte al cambio de guión. Lamentó que sus jugadores abusaran de los pases cortos, como si se tratase de "un rondo". Para impedirlo dio entrada a Bergantiños y Castro. Este último, no obstante, fue incapaz de contactar con sus compañeros, que abusaron del balón largo por arriba cuando no se producían los pases cortos.
Tampoco la entrada de Álex Pérez por Santos cambio el guion. Más que nada porque segundos antes llegó el empate del eterno rival. "No quería tirar atrás el cambio", explicó. Sí lo hizo, eso sí, hace dos semanas cuando Castro iba a ser el primer cambio ante el Lugo. Marcó Santos y cambió su decisión.