El Sporting ha ganado al Córdoba en el primer partido de 2018, con sufrimiento, emoción y sobre todo dos grandes argumentos como Mariño y Santos. Ambos fueron claves para conseguir los tres puntos y frenar la ambición del rival, que hasta en dos ocasiones recortó distancias en el marcador. Carlos Castro y Santos, por partida doble, hicieron los goles rojiblancos.
Con la vuelta de Sergio Álvarez y la sorpresa de Castro, manteniendo el 4-4-2. Esta fue la apuesta de Baraja, agradecida a la primera por el gol de Carlos Castro en el minuto 10. Su primero de la temporada, tras un buen pase de Isma López. Antes, Rubén García había podido hacer el primero, pero lo impidió el meta Kieszek. El Córdoba, en cualquier caso, atacaba con alegría, mientras el Sporting lucía su pegada, y a su portero. Mariño evitó el empate con una gran mano abajo, a disparo de Caballero, y apenas un minuto después sacó en largo para Isma López. Un pase medido que permitió al navarro asistir a Santos, que no falló. 2-0 en el minuto 18. Mejor imposible.
Cayó el diluvio y se rebajó la intensidad. Los visitantes dominaban el balón y los rojiblancos las ocasiones. Incluso con los mismos protagonistas, con Isma López centrando desde la izquierda y Santos rematando. Su cabezazo se fue desviado por muy poco. Acertó entre los tres palos minutos después con otro testarazo, en un saque de esquina, que el portero rival sacó como pudo. También, eso sí, Aguza tuvo el 2-1 a cinco minutos del descanso.
En la reanudación, cuando todos se las prometían muy felices, el Córdoba se metió en el partido con un tanto en el 49'. Aguza aprovechó la falta de contundencia defensiva del Sporting, con Calavera dudando entre tapar el hueco o salir a por el rival. Lo aprovechó Aguza con un disparo cruzado imposible para Mariño.
El Sporting reaccionó y también Baraja desde el banquillo. Rubén García pudo hacer el tercero si el balón no hubiese impactado en el palo, mientras Moi Gómez se preparaba para sustituir a Carlos Castro. Y ya con el sistema ajustado llegó el 3-1, con el tercer cabezazo de Santos en el 58'. Se lo merecía, por 'cabezón' y por reconocimiento al centro preciso de Carmona.
Sin embargo, el Córdoba no se iba a venir abajo, ni mucho menos. Con todavía más alegría seguía haciendo daño al Sporting, especialmente por su banda derecha. Así se produjo el 3-2 tras un centro que remató Sergi Guardiola a un metro de Mariño. Tocaba sufrir o, al menos, cerrar el partido. Restaban 25 minutos para el final.
Y la recta final se hizo larga, muy larga. El goleador Santos se tuvo que retirar, tocado muscularmente. Nacho Méndez entró en su lugar, antes ya lo había hecho Pablo Pérez por Rubén García. Precisamente con este último se quedó el Sporting como único delantero, mientras el Córdoba buscaba el empate sin el buen fútbol que antes sí que habia mostrado. Tampoco le hacía falta, sí en cambio el acierto que no tuvo Jona. Se quedó sólo ante Mariño, quien volvió a salvar al Sporting. Coreó su nombre El Molinón, que no sin sufrimiento terminó celebrando una victoria clave. El Sporting todavía está a tiempo de luchar por el ascenso.
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