La derrota del Sporting de Gión en el derbi asturiano ha vuelto a dejar de manifiesto las dudas que genera el equipo rojiblanco cuando tiene que competir lejos de su estadio y la falta de hombres que marquen las diferencias en ataque. Solamente Jony con sus arrancadas y su desborde creó sensación de poder desnivelar el encuentro.
Jony regresaba al Tartiere y volvía a demostrar que es un futbolista diferente, de los que logran hacen sumar puntos y triunfos a su equipo, pero que no puede llevar el peso por completo del fútbol de ataque del conjunto. Su actuación en el derbi asturiano dejó de manifiesto la importancia capital de tener hombres que puedan asociarse con el extremo en busca del gol.
Con Jony solo no le basta al equipo rojiblanco para poder desnivelar los encuentros, la banda derecha del ataque del equipo del 'Pipo' Baraja estuvo desaparecida en el campo carbayón, el centro del campo volvió a mostrar su carencias a la hora de generar situaciones de ventaja para los atacantes y los delanteros se desgastaron en una presión que acabó resultando totalmente estéril.
Si este equipo quiere volver a situarse entre los aspirantes al ascenso debe intentar ser protagonista en los partidos que disputa lejos de su estadio, como lo es cuando juega en casa y no esperar que únicamente la inspiración del extremo de Cangas desatasque el juego ofensivo.