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Enganchados para la recta final

Pablo Guisasola

El Sporting de Gijón consiguió una gran victoria en El Alcoraz, donde el Huesca llevaba 25 partidos consecutivos de Liga sin perder. Un triunfo de nivel en el mejor momento, justo antes de recibir al Rayo Vallecano en El Molinón y, como punto de partida, para los compromisos que tendrá a domicilio de aquí al final de temporada.

Las sensaciones y la buena racha invitan al optimismo. También el resultado en Huesca, aunque el calendario a domicilio frena la euforia. A priori, el equipo de Baraja tiene ante sí varios exámenes muy duros como visitante. Le quedan cinco partidos en casa y otros seis lejos de El Molinón. Entre estos últimos, se enfrentará de manera consecutiva a dos candidatos al ascenso.
Rayo Vallecano, Reus, Albacete, Barcelona B y Granada en el municipal gijonés. Cinco duelos que el Sporting, dado el rendimiento como local, afrontará con altas expectativas. También puede hacerlo como visitante. Más si cabe tras su victoria en Huesca, lo que ha reforzado la confianza del equipo. Lejos de Gijón, el conjunto asturiano medirá sus opciones de ascenso directo. Lo hará ante el Almería, Valladolid, Cádiz, Zaragoza, Tenerife y Córdoba. Tres citas de seis que se le atragantaron en la primera vuelta y que, en gran medida, motivaron el relevo en el banquillo.
En cualquier caso, la consigna de los rojiblancos es clara. Solo quiere mirar al siguiente objetivo. El partido a partido que transmite su entrenador Rubén Baraja. Así, el encuentro ante el Rayo Vallecano servirá una oportunidad para la confirmación. El Sporting, en caso de victoria, se quedaría a solo dos puntos del ascenso directo. Una meta que puede alcanzar con la ambición y confianza que proyecta sobre el terreno de juego.

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