Rendidos a Lora

Alberto Lora fue el gran protagonista en el Sporting. Antes del encuentro, al ser titular ocho meses después. Durante el partido, al anotar el tanto que abría el marcador y al final del mismo, al abandonar el terreno de juego acompañado de una emocionante ovación que sirvió como reconocimiento a su gran encuentro y a toda una vida de servicio a unos colores.


Apoteósico fue el regreso del mostoleño al equipo titular. Desde la jornada nueve, frente a la Cultural, no aparecía Lora en la foto de inicio. Siete meses y diecisiete días después volvía al lateral derecho el capitán rojiblanco. El momento de forma de Calavera, al que el técnico ya había amagado en dar 'un descanso' la pasada jornada, propició la reaparición de un futbolista al que las lesiones han impedido pelear por su habitual lugar en el equipo.
Si llamativo el era el tiempo si ver a Lora en el once, sorprendente fue su aparición como inesperado goleador. No en vano, desde la temporada del último ascenso, no lograba el lateral llevar el esférico al fondo de las mallas. 1.309 días han tenido que pasar, para que el que fuera goleador en su etapa de formación, mediocentro en sus inicios y lateral en su confirmación como futbolista, volviera a saborear las mieles del gol. Justo en el mejor momento, quizás en el último encuentro ante su público.
Si lo de hoy fue una despedida, difícilmente se podría mejorar. Únicamente un ascenso podría poner mejor broche a toda una vida unido a unos colores. Y Lora luchará por que así sea.