Divertida anécdota la que ha protagonizado el seleccionador nacional Luis Enrique durante la rueda de prensa por la convocatoria del combinado español para los encuentros ante Gales e Inglaterra que se jugarán la próxima semana. Bombardeado a preguntas acerca de las ausencias en la convocatoria, el entrenador asturiano tiró de su habitual sarcasmo para evadirlas.
Tuvo tiempo de acordarse de sus raíces durante su intervención. Cuando fue cuestionado acerca de la ausencia de jugadores del Sevilla en la convocatoria, el gijonés respondió: "Seguramente si hablamos con los del Sporting de Gijón también se quejarán de que no haya jugadores de su equipo. Lo puedo llegar a entender, es lógico. Está haciendo una buena temporada el Sevilla, y tiene jugadores en esa pre-lista, pero estas son las decisiones que tengo que tomar, sé que no le va a gustar a todo el mundo, pero lo acepto de buen grado".
No fue el único guiño que le tiró al equipo que le llevó a debutar en Primera División. Cuando fue cuestionado acerca de las características que busca en un delantero, le recordaron su segunda temporada en el equipo sportinguista, la 1990-91, donde acabó con 15 goles en la Liga y 3 en Copa del Rey. Esa buena temporada acabó traducida en su fichaje por el Real Madrid por 250 millones de las antiguas pesetas en las que estaba valorada su cláusula de rescisión contractual. Luis Enrique quiso quitarse mérito y valorar el trabajo en equipo de aquella plantilla del Sporting: "Tenía muy buenos compañeros y me aprovechaba de su trabajo".