La Copa de Dani Martín
El Sporting se ha clasificado para los dieciseisavos de final de la Copa del Rey, después de una sufrida victoria sobre el Rayo Majadahonda. El conjunto gijonés, que pudo golear en la primera parte, se impuso en la tanda de penaltis. El encuentro sirvió para romper el gafe de los delanteros, el de los 11 metros y dar una tregua a la situación del técnico.
Con solo dos titulares, en relación con el último partido de la Liga 1|2|3, el Sporting comprobó desde los primeros instantes lo bien que le salía el plan. Todo lo contrario el Rayo Majadahonda, que de primeras perdió al asturiano Jorge García. El exrojiblanco se tuvo que retirar tras un acción con un revolucionado Nefatli.
Los de Baraja no tardaron en avisar. Pablo Pérez la tuvo clarísima pero, incomprensiblemente, no atinó. Traver le había servido el gol en bandeja, y empeñado en liderar el contragolpe lo intentó también con Nacho Méndez. Tampoco acertó el canterano.
Cumplido el primer cuarto de hora. la ocasión fue para Neftali. De nuevo con Traver de protagonista, y Pablo Pérez asistiendo al delantero del filial, quien falló ante Ander Cantero.
Al Sporting le costaba nada crear ocasiones. Por fin podía desplegar su juego vertical con Traver canalizando todas las jugadas. Como Pablo Pérez, de cuyas botas nació la jugada del 0-1. Robó el balón muy cerca del área de Dani Martín, lo recogió Traver para asistir en largo a Neftali, quien condujo hasta el momento oportuno para disparar y romper el gafe de los delanteros.
Su gol incluso supo a poco. Sobre todo tras una nueva oportunidad rojiblanca, esta vez de Pablo Pérez. La generó Noblejas, bien pese a su falta de actividad, con un centro que el gijonés remató centrado. Se la encontró Ander Cantera para evitar el segundo. Mereció más el Sporting antes del descanso.
En la reanudación, sin embargo, se equilibraron las fuerzas. O al menos el conjunto gijonés dejó de llegar con tanta claridad al área rival. Además fue cediendo metros poco a poco. Resistía sin demasiados apuros, con algún susto, sobre todo a balón parado. De esa forma Toni Martínez estuvo a punto de hacer el empate en el minuto 71.
Baraja también lo estaba viendo, por lo que dio salida a Pedro Díaz por Álvaro Traver. El equipo se quedó sin su único extremo, sin su mayor argumento al contragolpe. A cambio, el técnico gijonés buscó tener algo más el balón y, de paso, el talento y el golpeo de Pedro Díaz. El larguero, en el 75', evitó el golazo del canterano tras, prácticamente, el primer balón que tocaba.
Aún quedaba un cuarto de hora para el final, suficiente para la polémica por una acción de Salvador en el área gijonesa, el debut de Isma Cerro y la parada, que de poco sirvió, de Dani Martín. Como en Riazor o Pamplona, el gol de Aitor en el 89' dejó claro que el Sporting siempre paga cuando pierde el equilibrio. Cuando apenas sobrepasa la línea del centro del campo. Prórroga.
Poco antes había salido Morilla. Estaban groggy los de Baraja y en auge los de Iriondo. De los locales eran las llegadas, con un disparo que se le complicó a Dani Martín y otro ligeramente desviado. Respondió, en todo caso y cuando ya nadie lo esperaba, el Sporting con una buena combinación de Pedro y Morilla, cuyo remate despejó Ander. Llegó Neftali al balón suelto, aunque presionado y sin lucidez para meterlo dentro.
Los penaltis sobrevolaban el verde en el segundo acto de la prórroga. Por las sensaciones, y a pesar de la última de Isma Cerro, el mal menor para los de Baraja. A los 11 metros.
Ahí, en ese momento, emergió la figura del meta Dani Martín. Providencial para el pase del Sporting, que este viernes estará en el sorteo.