Tras el empate ante el Lugo en El Molinón - Enrique Castro Quini, el Sporting de Gijón se ha quedado sin un objetivo deportivo a falta de cuatro jornadas. El segundo intento por el ascenso ha sido mucho peor que el primero.
Durante el próximo mes, hasta el 9 de junio que termina la liga regular, el Sporting se jugará poco más que unos cientos de miles. Según su posición obtendrá un porcentaje de la partida de los derechos televisivos reservada para la clasificación. Una medida que, precisamente, busca motivar a los equipos que, como el Sporting, se quedan sin una meta que cruzar durante las últimas jornadas.
Así, existen diferencias económicas para el séptimo clasificado final o, por ejemplo, el décimo. Más o menos, casi medio millón de euros. Cantidades que para el Sporting tendrán bastante influencia el curso que viene, en el que ya no contará con el extra por la ayuda al descenso.
De cara la temporada 2019/20, la entidad asturiana dejará de ser uno de los equipos con más presupuesto de la categoría. En esa línea, no podrá mantener la quinta posición en el ranking de tope salarial. Tampoco sus cifras actuales salvo traspasos.
Para los rojiblancos, eso sí, la economía no ha sido influyente en los últimos años. No en vano, consiguió el ascenso en una grave situación financiera en 2015 y un año después, aún con la sanción para fichar, fue capaz de mantener la categoría.