Javi Fuego, centrocampista del Sporting de Gijón que volverá a jugar como local en El Molinón después de doce años, ha afirmado este miércoles que "los partidos los ganan los equipos pero los objetivos los consiguen las plantillas" y ha admitido que el partido ante el Rayo Vallecano será "muy especial" para él.
"Jugar en el Sporting hace muy evidente que todo pasa por subir, pero ese objetivo lo tienen en estos momentos otros 12 ó 14 equipos más", indicó Fuego, que considera que "poner el foco en lo lejano te aleja de lo cercano".
El centrocampista es la piedra angular del proyecto sportinguista para esta temporada y su vuelta ha sido muy bien acogida por la afición y el jugador reconoce que se fue "de un gran club" y ahora vuelve "a un club mejorado" y afirmó que "todo lo que dijeron en las negociaciones se está cumpliendo al pie de la letra".
"No hay que equivocarse, está claro que algunos mamamos el Sporting desde niños, pero eso no quiere decir que un jugador de fuera no pueda sentir el club y en este vestuario hay muchos jugadores que tienen ese sentido de pertenencia", declaró.
El centrocampista considera que "el equipo supo competir en Girona" y está seguro que la expulsión de Damían Pérez "lastró el rendimiento" por lo que da por bueno el punto conseguido a pesar de que el conjunto catalán empató en el minuto 89.
Javi Fuego reconoció que el Sporting tiene un duro inicio de temporada "pero también lo es para los rivales" y consideró al Rayo Vallecano como "un equipo complicado", lo que augura un "partido muy atractivo para el espectador".
El sportinguista tiene pasado en Vallecas, donde coincidió con Trejo, con el que desde entonces guarda una gran amistad, dado que el fútbol "hace que conozcas a mucha gente y también que hagas algún amigo y este es el caso", a la vez que le dedicó palabras de elogio como futbolista ya que es "muy desequilibrante".
La plantilla rojiblanca empezó este miércoles la preparación del encuentro del domingo ante el Rayo Vallecano y lo hizo en la única sesión de la semana prevista con libre acceso a los aficionados ya que las de jueves, viernes y sábado serán a puerta cerrada.
José Alberto deberá decidir quien ocupa el lateral izquierdo, donde será baja Damián Pérez, que fue expulsado el pasado domingo en el partido ante el Girona en una jugada polémica y en la que decidió el VAR.
El técnico optará probablemente por cambiar de banda a Molinero y dar entrada en la derecha a Unai Medina ya que el resto de jugadores que podrían situarse en la derecha son del filial, que además inicia este fin de semana la liga.