Abelardo, convencido de que el domingo será "un espaldarazo para Jose Alberto"

Este martes ha tenido lugar la entrega de los premios de la XII edición del Trofeo Quini, un acto que organiza anualmente la Federación de Peñas Sportinguistas junto a El Comercio, y que se celebra en el Hotel Artiem de Quintueles. Este año, Abelardo Fernández ha tomado el relevo de Luis Enrique y ha sido el encargado de entregar los premios. La leyenda rojiblanca comenzaba su presentación explicando lo que significa tal cosa para él.

"Un homenaje a Quini para entregar estos trofeos, para mí es una emoción y un orgullo tremendo. He tenido la suerte de coincidir con el 'Brujo' y conocerlo de futbolista y en el trabajo. Fue nuestro delegado en el año del descenso, como embajador y relaciones instrucciones cuando estábamos en primera. He tenido muchas conversaciones con él", explicaba emocionado.

"La verdad que nuestras carreras han estado unidas. Yo le he dado y él me ha dado a mí", añadía Abelardo, que también tenía palabras para un reforzado José Alberto: "Cuando le vi jugar en al Avilés le fiche para el Sporting. Él no creía que llegase a ser futbolista profesional y por eso me daba las gracias. Para mí, más que un jugador es un amigo".

Sobre la situación del ovetense, Abelardo se muestra convencido de que salvará el barco: "Le he visto de todo al Sporting. El otro día contra el Almería, partidazo después de dos partidos no muy buenos. No estuvieron espectaculares ante el Fuenlabrada, pero muy serios, como tiene que ser en Segunda. Mantener una regularidad es muy difícil. Este sábado va a ser un espaldarazo, se lo merece. Jose Alberto, es un gran entrenador".

En otro orden de cosas, Abelardo también analizaba su propio futuro en los banquillos: "No ha habido nada. Yo encantado de que hablen de ti para bien, de poder entrenar al Leganés u otros equipos, pero me entristece por Mauricio (Pellegrino), que fue compañero mío. Estoy tranquilo, no estoy con ese ansia de entrenar. Muy tranquilo en Gijón, con mi familia, haciendo mucho deporte, disfrutando de los fines de semana, saliendo a cenar...".

E insistía: "Tiene que ser una cosa que me apetezca, como en su día el Alavés, que era un equipo similar a mi forma de ver el fútbol. Si sale un equipo que sea afín a mí y yo tenga ganas y esté motivado, por supuesto que sí aceptaría".