Manu García cuajó una grandísima actuación individual en el partido del Sporting de Gijón frente al Real Zaragoza. El mediapunta asturiano dio dos asistencias en su partido y fue totalmente indetectable para la defensa rival. Especialmente destacada fue la acción del primer tanto, en la que se coló en el área, dribló, se asoció con Djurdjevic y cedió en corto para el gol de Isma Cerro, dejando la jugada más destacada del partido.