Después de la derrota sufrida frente al CD Tenerife este viernes en El Molinón, la figura del entrenador del Sporting de Gijón, José Alberto López, está más que nunca en entredicho. Un equipo que se vino abajo en la segunda mitad y que en la primera fue incapaz de perforar la meta rival, y que además está a un paso del descenso.
Aunque el propio entrenador del conjunto rojiblanco aseguraba tras el encuentro que se encuentra "fuerte" y "con ganas" para sacar esto adelante, lo cierto es que no termina de dar con la tecla y su continuidad al frente del banquillo gijonés está entredicho.
"No dudo de la plantilla ni de nuestro trabajo, aunque entiendo las críticas porque los resultados no los estamos consiguiendo", reconoció en la sala de prensa de El Molinón.
Cuando se le preguntó si temía por su futuro, indicó que "parece que llevo jugándome el puesto desde que me pusieron, estoy bien, tranquilo analizando las cosas".
Con su figura más cuestionada que nunca, está por ver qué es lo que ocurre finalmente con el futuro de José Alberto López en el Sporting durante las próximas horas.
Hasta el momento, el entrenador asturiano había contado con la confianza de la directiva para enderezar el rumbo del equipo en LaLiga SmartBank, pero la derrota ante el Tenerife ha dejado muy tocado al conjunto sportinguista que ya lleva cuatro partidos sin conocer el triunfo.
El Sporting se ha ejercitado de nuevo este sábado a las 11.30 horas en Mareo con José Alberto sobre el césped.
Con 18 puntos en el casillero, el conjunto gijonés está a un paso del descenso. En concreto, son sólo tres puntos de distancias los que le separan de la quema, pero hay que tener en cuenta que todos los equipos que están por debajo todavía tienen que jugar sus respectivos partidos de la jornada.
Una complicada situación para José Alberto cuando hace sólo unos días se cumplió un año desde su llegada al banquillo del Sporting.
365 días en los que no se han cumplido los objetivos y que las sensaciones no han mejorado a las que ya había en la era de Rubén Baraja.