Las quejas de la Mareona en su visita a El Sardinero

La afición del Sporting de Gijón respondió en masa a la visita a Santander, llenando las gradas de El Sardinero de color rojiblanco. Cerca de 3.000 seguidores disfrutaron de la victoria de su equipo a domicilio por primera vez en 2020, si bien la gran afluencia de aficionados provocó también varios problemas en el acceso al estadio.

Además de las entradas cedidas por el Racing, más de 1.300, la Mareona quiso aprovechar la cercanía entre ambas ciudades para animar a los suyos. Así las cosas, el fondo sur del campo santaderino se inundó del color rojo y blanco, pero también las zonas aledañas, repletas de sportinguistas que compraron la entrada través de la página web del Racing.

Los problemas llegaron en el momento de acceso al recinto. En conversación con La Nueva España, varios aficionados se quejaron de largas colas que no se disolvieron una vez iniciado el encuentro. Además, una vez dentro, la seguridad impidió el acceso a la grada, alegando la falta de asientos vacíos disponibles. Muchos tuvieron que ver al partido de pie aún en la zona de vomitorios.

Gran afluencia y buen gesto de la Mareona

Por otro lado, una vez olvidados los problemas, el ambiente vivido este domingo en El Sardinero fue el mejor de toda la temporada. El estadio santanderino vivió su mejor entrada del curso, superando en cerca de 8.000 espectadores la media (20.158).

Además, las aficiones de ambos equipos supieron combatir los insultos de ciertos sectores de la grada con cánticos de unión. Los gritos de "Racing, Racing" lograron imponerse por goleada a otros que buscaban reírse del momento deportivo del conjunto cántabro.