El acceso a la playa es uno de los grandes quebraderos de cabeza que deberán afrontar los municipios costeros de España de acuerdo a la nueva normalidad provocada tras la crisis sanitaria. El coronavirus ha mermado el uso de las zonas comunes en las últimas fechas, y el disfrute del mar no será una excepción a corto plazo. No obstante, contrario a los rumores, la entrada a los arenales en Asturias, al igual que en el resto de la península, no será de pago.
Así lo especifica el Boletín Oficial del Estado -BOE- en su última actualización a fecha de miércoles 27 de mayo, que por otro lado confirma la obligación de cada ayuntamiento de establecer medidas concretas para garantizar la seguridad de todos los usuarios.
"Los ayuntamientos podrán establecer limitaciones tanto de acceso como de aforo en las playas a fin de asegurar que se respeta la distancia interpersonal de, al menos, dos metros entre bañistas", dicta la legislación vigente.
Ese mismo texto reivindica que el acceso a las playas será totalmente gratuito, por lo que los usuarios no podrán ser cobrados a instancias de ningún ente municipial, encargados de establecer medidas que por otro lado sí podrían incorporar un límite de tiempo.
"A efectos de garantizar su disfrute por el mayor número posible de personas en condiciones de seguridad sanitaria, podrán también establecer límites en los tiempos de permanencia en las mismas", añade el texto incluido en el BOE. Por otro lado, será obligatorio por parte de los ayuntamientos la imposición de una distancia mínima interpersonal, que deberá establecerse a partir del espacio del que disponga cada bañista, de cuatro metros cuadrados.
En relación a esta medida adoptada desde el Gobierno de España, 19 concejos del litoral asturiano ya llegaron a un acuerdo para pedir de forma unánime un fondo extraordinario de acuerdo a esta obligatoriedad. Entre los puntos en común, estos municipios acordaron la necesidad de recordar a los bañistas que han de respetar la distancia de seguridad establecida tanto en los accesos como en las propias playas, y que será exigible el empleo de mascarillas si no se asegura el distanciamiento mínimo exigido.
Accede aquí al texto completo del BOE del 27 de mayo.