Valioso punto cargado de trabajo y esfuerzo

El Sporting de Gijón sumó un punto valioso ante el Rayo Vallecano en un partido lleno de altercados, sobre todo en la segunda parte. Una lesión, una expulsión, un gol en propia puerta y una jugada de infarto en el tiempo de descuento tras un penalti para el Rayo que el VAR rectificó dan valor al empate cosechado por el cuadro de David Gallego.

El Sporting comenzó muy fuerte y encerró al Rayo en su parcela, pero sus intentos ofensivos se limitaron a disparos lejanos de Aitor García o a centros laterales en jugadas a balón parado. Poco a poco, el Rayo, comandado por Mario Suárez y Óscar Trejo, equilibró el dominio, pero sus llegadas a las inmediaciones del área local no conllevaban peligro.

Tras el descanso, se lesionó Nacho Méndez y fue sustituido por Carmona, quien a los nueve minutos de estar en el campo fue expulsado tras una entrada a Fran García por la que el árbitro le mostró tarjeta amarilla, pero, tras consultar con el VAR, cambió su decisión y expulsó al jugador del Sporting.

El Rayo, con un jugador más, se fue a por el partido aprovechando el desconcierto rojiblanco y su primera ocasión fue un remate de cabeza de Martín que salió alto. Poco después, el árbitro anuló dos goles al conjunto madrileño, el primero de Catena por una clara mano y el segundo, de Babin en propia puerta, por falta previa al central del Sporting.

Cuando parecía que el conjunto madrileño estaba en mejor posición para hacerse con la victoria, un centro de Aitor García lo desvió Fran García al fondo de su portería a 15 minutos para el final. El Rayo, sin embargo, fue capaz de igualar en el minuto 86, después de que Andrés Martín firmara una volea imparable a la escuadra derecha de Mariño

En el tiempo añadido el árbitro pitó penalti por mano de Javi Fuego, pero, de nuevo a petición del VAR, revisó la jugada y comprobó que el balón le había pegado en la espalda.