El Sporting sucumbió en la última jornada contra el Albacete por 2-1. Pese a que el equipo dio la cara y al gol anulado, los de Miguel Ángel Ramírez no pudieron llevarse algún punto de vuelta a casa. La asignatura pendiente de los rojiblancos a lo largo de la temporada ha sido el rendimiento lejos de El Molinón-Enrique Castro "Quini".
El conjunto gijonés tan solo ha conseguido sacar 11 puntos de 45 posibles en lo que va de campeonato liguero. Un lastre que está produciendo que no pueda optar a un objetivo más ambicioso y se tenga que conformar con no sufrir en el último tramo del presente curso.
Para ver la última victoria a domicilio, hay que remontarse al mes de diciembre cuando los sportinguistas vencieron por 0-1 al Lugo en el Anxo Carro. Y es que solo en dos ocasiones han obtenido los tres puntos en quince partidos como visitante. Además, encadenan cinco derrotas consecutivas y donde solo han anotado dos goles en los últimos siete encuentros. Unos números que no se corresponden por un club que quiere estar en la parte noble de la tabla.
El calendario del mes de marzo no es halagüeño para el Sporting. Completada la salida a Albacete, y tras recibir al Mirandés este fin de semana, los de Gijón tendrán que desplazarse hasta el estadio de dos de los equipos de arriba. Las visitas a Burgos y Las Palmas serán duras para la parcela asturiana, pero en la que tratarán de revertir la dinámica lejos de El Molinón-Enrique Castro "Quini". La visita a Gran Canaria será todavía más complicada tras conocerse que Djuka irá convocado con Montenegro por lo que el reto será mayúsculo.