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Keita Shimada, ídolo del Sporting en la ciudad que encumbró a Takashi Inui

Redactor de Ediciones de ElDesmarque

Keita Shimada nos contó a ElDesmarque hace unos meses que le gustaría que su historia quedase plasmada en alguna suerte de película. Para una película no sé si dará, pero igual para una serie sí. Una serie que este sábado ha vivido su segundo capítulo en el partido en el que el Sporting confirmó la permanencia matemática en LaLiga SmartBank y que, como en los últimos lanzamientos de muchas plataformas, está repleto de tramas y subtramas.

Empezando por el escenario, Ipurua, el campo en el que desplegó su mejor fútbol el jugador japonés más recordado de la historia de LaLiga: Takashi Inui. De la mano de José Luis Mendilibar, el finísimo extremo dejó once goles en tres temporadas y un recuerdo imborrable en la afición armera antes de fichar por el Real Betis Balompié.

Teniendo un jugador japonés en sus filas, el Eibar se convirtió en uno de los clubs de LaLiga más apoyados en el país del Sol Naciente. Y da la casualidad de que Keita e Inui son de la misma ciudad, de Shiba. En declaraciones a ElDesmarque el sportinguista más conocido de las últimas semanas admitía que quería pasar por la tienda de Ipurua para comprar algunos productos para sus amigos: "Son fans del Eibar por Inui", aseguró.

Keita Shimada se saca fotos con aficionados de la SD Eibar (Foto: ElDesmarque).

Keita, una estrella entre la afición del Sporting

La historia de Keita parece haber calado muy hondo en la afición del Sporting, que le aclamó en su llegada a Ipurua. A primera hora de la mañana salió de Gijón con la Peña Sentimiento Rojiblanco La Regence para presenciar la 'final' que se jugaba su equipo contra el equipo armero.

Abrumado por el cariño que está recibiendo del sportinguismo, era una tarea complicada entablar una conversación con él: mayores y pequeños se querían sacar fotos con él. ¡Incluso varios aficionados del Eibar también se animaron! En todo este tiempo se ha convertido en todo un icono para La Mareona, que le ha acogido con un cariño especial. Y eso que no deja de ser uno más.

A la conclusión del partido, y con la permanencia ya en el bolsillo, Keita regresó a Gijón con los peñistas antes mencionados. Todavía le queda una posibilidad más para disfrutar de su equipo en vivo, en el templo, en El Molinón, el próximo domingo a las 16.15 horas y contra una Ponferradina ya descendida.

Un partido que, para muchos será intrascendente y ni siquiera se acercarán a verlo, pero que tendrá un valor especial para alguien como él, que no tendrá muchas oportunidades más para ver a su equipo.

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