Hay muchos alicientes, deportivos y sentimentales, para el duelo norteño entre el Deportivo de la Coruña y el Real Sporting que se jugará este domingo en un Riazor lleno. Pero sin duda será un partido especial para un Juan Otero que también se enfrenta a su pasado.
Y es que fue el equipo coruñés el que le dio la oportunidad de dar el salto a Europa en 2015, cuando tan solo tenía 20 años, para reforzar a un Fabril que contaba con jugadores como Edu Expósito, Hugo Rama o su ahora compañero en el Sporting Róber Pier.
Siempre atentos a lo que se cuece en Sudamérica, la secretaría técnica del Dépor apostó por traerse cedido a un jugador que venía dejando buenas actuaciones segunda división de Colombia y que había disputado el Mundial sub 20 con la selección cafetera. Todas las dudas sobre una posible adaptación se disiparon rápido.
Cayó de pie en A Coruña. Marcó 17 goles en los 32 partidos que disputó en la siempre exigente Tercera gallega. Y Víctor Fernández le llamó para entrenar con el primer equipo.
Todo hacía indicar que el Deportivo ejecutaría la opción de compra y que incluso podría hacerse un hueco en el primer equipo. Nada más lejos de la realidad. Tal y como asegura La Opinión de A Coruña la secretaría técnica consideró que la opción de compra era demasiado elevada.
Aún así, en noviembre de 2016 volvieron a intentar su fichaje para el Fabril, pero no se materializó y acabó firmando por Estudiantes de La Plata, que sí que abonó cerca de 600.000 euros para hacerse con sus servicios en propiedad. En El Espectador, un periódico colombiano, Otero declaró que su intención era "jugar en Primera" y que el Dépor quiso que continuara.
Del histórico club argentino saltó al Amiens de Francia, donde tampoco terminó de cuajar, y Santos Laguna, del Grupo Orlegi, apostó por él. Se reencontró con su mejor versión, por lo que América de México realizó una potente inversión que no terminó de dar sus frutos.
Aún así el Grupo Orlegi volvió a acudir a su 'rescate' para que reforzase al Real Sporting después de que se hicieran con la propiedad del club en el verano de 2022. El resto es historia: tras dos temporadas como cedido rindiendo a un gran nivel, en verano terminó recalando en propiedad en Gijón, donde parece haber encontrado su sitio.