Los presidentes del FC Barcelona, Joan Laporta, y del Real Madrid, Florentino Pérez, fueron recibidos este sábado en la Embajada de España en Arabia Saudí por el embajador español de este país, Jorge Hevia, con motivo de la disputa este domingo de la final de la Supercopa de España en el Al-Awwal Park de Riad.
El acto también contó con la presencia del presidente de la Comisión Gestora de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF), Pedro Rocha.
Con el trofeo de la Supercopa y el balón Amberes con el que se está disputando el torneo como testigos, Hevia dio la bienvenida a todos los invitados y la enhorabuena a Barça y Real Madrid como finalistas, equipos de los que glosó su expansión y reconocimiento internacional.
El embajador subrayó "la importancia que está tomando el fútbol español en Arabia Saudí", con acuerdos que serán "buenos" para ambos países. "Ayudadnos a que se conozca mejor este país y el proceso de transformación y crecimiento que está viviendo", pidió Hevia a los presentes antes de desear suerte a ambos equipos.
Por su parte, Florentino Pérez y Joan Laporta, acompañados por varios de sus directivos, tomaron la palabra durante el acto para destacar la importancia del torneo y del partido para el fútbol español. El Clásico, coincidían los dos presientes, despierta emoción y pasiones en todo el mundo.
El presidente merengue destacó que ambos equipos finalistas suman 1.000 millones de seguidores en redes sociales en todo el planeta, que dan cuenta de su importancia mundial. "El partido de mañana será una fiesta del fútbol, de un fútbol que no entiende de fronteras", afirmó.
Laporta, por su parte, mostró su satisfacción por que la Supercopa se dispute en Arabia Saudí: "Gracias a la RFEF por darle a esta competición la relevancia mundial que se le está dando al jugarse aquí".
Pedro Rocha cerró los parlamentos destacando que la Supercopa es "una competición importantísima" para la RFEF, "puesto que permite al fútbol español abrirse al mundo".
"La Supercopa de España es una competición única que permite vivir el mejor fútbol, como mañana se demostrará aquí en Riad", dijo antes de subrayar que el torneo "debe traer unión, fraternidad e igualdad; sobre todo, igualdad".
Como cierre del acto, se hizo entrega protocolaria de obsequios al embajador español: el balón Amberes, por parte de la RFEF, y las camisetas de ambos equipos, entregadas por sus respectivos presidentes.