Gerard Piqué ha declarado en el Juzgado de Instrucción número 4 de Majadahonda como investigado por el 'caso Supercopa'. El exjugador del FC Barcelona y de la Selección Española ha presentado diferentes pruebas y las cuentas de su empresa Kosmos para demostrar que el acuerdo entre la RFEF y Sela Sport Company de Arabia Saudí por la competición es totalmente legal. Además, ha defendido que ningún alto cargo de la Federación habría recibido comisiones por este trato, tal y como argumentó también Luis Rubiales, otro de los investigados en el caso.
Luis Rubiales, expresidente de la RFEF, y Gerard Piqué están siendo investigados por su implicación en el acuerdo que trasladó la Supercopa de España a Arabia Saudí. Piqué, a través de su empresa Kosmos, habría recibido comisiones millonarias (por un valor de 40 millones de euros) por mediar en el contrato entre la RFEF y las autoridades saudíes. La investigación se centra en la legalidad de estos pagos y si existieron conflictos de interés entre todas las partes implicadas.
Piqué ha acudido a la ciudad madrileña de Majadahonda en la mañana del viernes para declarar ante la juez. Ha defendido que no existe ningún tipo de incompatibilidad en este acuerdo. Además, ha añadido que en España no se ha valorado lo suficiente las cantidades de dinero que consiguieron gracias a llevar la competición al país saudita: "En otro país me habrían puesto un monumento", tal y como revela El Mundo.
Este medio añade que ha terminado su comparecencia entre lágrimas, alegando que se ha producido un daño reputacional irreparable hacia su persona y que "nadie le va a compensar por los perjuicios que le ha ocasionado el procedimiento judicial".
A pesar de este episodio, ha abandonado las instalaciones sonriente y tranquilo, sin hacer declaraciones a los periodistas que aguadaban su salida. Se ha limitado a sonreír incluso cuando le han preguntado si tiene miedo a que le retiren el pasaporte, ya que eso supondría que no podría acudir a Miami a ver a sus hijos, donde viven con su madre, Shakira.