La Junta, cortita y al pie

Esta tarde se celebrará en el Palau de la Música de Valencia la Junta General de Accionistas del Valencia CF más tranquila que se recuerda. Será la última en la que la Fundación del Valencia CF ejercerá como máxima accionista de la sociedad y, por tanto, la última antes de que Peter Lim tome el control.

Se prevé, por tanto, una reunión tranquila y rápida, con pocos puntos del orden del día -cuatro, pero uno es nombramiento de auditores y otro ruegos y preguntas- y eminentemente técnica y económica. Es más, dadas las medidas tomadas por el club para evitar que se pueda retransmitir nada en directo, no se espera ningún revuelo social ni grandes intervenciones por parte de los accionistas. Todos, propios y extraños, dan la sensación de guardar fuerzas para la Junta General Extraordinaria que se celebrará el próximo 1 de diciembre y en la que el club pasará a ser propiedad de Peter Lim. 
Con el voto favorable de la Fundación, que posee el 70% de las acciones de la entidad, con la paz social instaurada y la calle a favor de Amadeo Salvo, sólo un anuncio de éste respecto a su continuidad o no, podría alterar los ánimos (en un sentido un otro) de una masa accionarial que hoy sólo dará el Sí quiero a lo sucedido en el último año y aprobará un presupuesto que está marcado por el desembarco del nuevo dueño.