Nada violenta a un poderoso Valencia

El Valencia CF resolvió sin apuros su partido contra el Rayo en veinte minutos mágicos en los que volvió a presumir de tener una pegada letal. En el 12 abría el marcador Feghouli; veinte minutos después el argelino hacía el segundo y, casi con la celebración del 2-0; Piatti se pegaba un carrerón para lograr el 3-0 con el que se llegó al final de los noventa minutos. El Valencia vuelve a ganar y nada le violenta, ni el árbitro, ni las ausencias, ni los cambios de sistema.

A nadie sorprendió el once inicial de Nuno Espírito Santo que decidió suplir la ausencia de Dani Parejo con Rodrigo De Paul; si la treta más propia de patio colegio del Rayo de obligar al equipo a cambiar de campo. Atacaba en la primera parte en la portería del fondo norte y no le fue nada mal. En cinco minutos los madrileños ya habían cometido un penalti no señalado sobre Barragán y Otamendi había cabeceado fuera por poco un córner.
El dominio local era insistente desde los primeros instantes y, los jugadores de banda valencianistas estaban destrozando al Rayo. Ahora, Gayà, más tarde Piatti; después los diestros... Era cuestión de tiempo que acertaran y en el 12 llegó el premio. Barragán centraba medido para que Feghouli batiera de cabeza a Cristian Álvarez. 1-0 y todos más tranquilos. 
El argelino, un vendaval en la primera mitad, asistiría magistralmente instantes después a De Paul para que el argentino intentara ampliar la ventaja de los locales. Y, aunque su remate superó al meta vallecano, se lo sacó la defensa. No se había cumplido el 20' y Piatti volvía a rematar a Cristian Álvarez. En esta ocasión el disparo se estrellaba en el lateral de la portería rival. El Valencia CF quería sentenciar por la vía rápida y sumar tres puntos por primera vez en un mes.
El Rayo viendo que su defensa hacía aguas, se encomendó al contraataque para tratar de contrarrestar el aplastante dominio valencianista. Fue en vano. La ocasión más peligrosa fue de Baptistao que no aprovechó el regalo de Alves en el 28. El meta trató de regatear a su compatriota y casi le cuesta un disgusto al equipo. Por fortuna, Leo no supo cómo resolver la ocasión.

Dos fogonazos más y partido sentenciado

En el otra área, la cosa era bien distinta. En el 33, nuevo córner fruto del dominio valencianista que bota Piatti, Negredo remata de forma acrobática, el meta local no acierta a despejar y Feghouli conseguía el 2-0. Nadie dudaba que el encuentro estaba sentenciado pero, como incrédulos hay en todas partes, Piatti se encargó de alejar cualquier nubarrón y se marcó un carrerón en el 35 para, tras superar a todos los rivales, ejecutar a Cristián Álvarez. El delantero celebró con ímpetu el 3-0, pues siempre es de los más cuestionados y su tanto era el premio a la titularidad que le había dado Nuno en detrimento de Rodrigo.  
La segunda mitad transcurrió por derroteros similares. El Valencia atacaba y, aunque el Rayo fue el que primero gozó de ocasiones, el dominio era valencianista. El rival sacó toda su artillería -Licà y Manucho- pero nada cambió el panorama. El Valencia atacaba y el Rayo no tenía mordiente.
Sólo la segunda amarilla a André Gomes en el minuto 70, y la consiguiente expulsión, le dio algo de aliciente a un choque en el que Teixeria Vitienes quería su dosis de protagonismo. Carrerita al banquillo local para hacerse de notar, amarilla a Negredo innecesaria, público enardecido y el trencilla cántabro contento. 
El juego y los ánimos se normalizaron. La noche, incluso, pudo ir a mejor si Rodrigo, sólo ante Cristian Álvarez hubiera cerrado la goleada en el 80. No tuvo suerte, no está acertado y se le nota excesivamente ansioso al buen delantero hispano-brasileño. Piatti, con calambres dejó su puesto para Orban y para cerrar una tarde en la que nada, ni el provocador arbitraje de Teixeira, violentó a un efectivo Valencia, que aún pudo conseguir un resultado más amplio.