Negredo-Nuno: la vida sigue igual
En la Ciudad Deportiva se ha comprobado que la vida sigue igual entre Álvaro Negredo y Nuno Espirito Santo. Ese choque de manos con mirada incluida a los ojos entre ambos ha sido un signo más que evidente de que no existe ningún tipo de problemas entre el delantero y su entrenador. Así para los que viera fantasmas donde nos lo había por el enfado de Negredo en Mestalla tras marcar ante el Levante y por no festejar el gol, nada de nada. Aquel enfado de Negredo se debió a que el futbolista necesitaba marcar y que dentro de su exigencia individual tomó la decisión de no celebrar el gol porque por un lado sentía que no está teniendo suerte de cara al gol y, además, hizo el tercer gol de un partido que ya estaba resuelto desde el primer tiempo.
Nuno y Negredo se han visto las caras en la Ciudad Deportiva tras el partido que el delantero disputó ante el Levante el pasado lunes en Mestalla y la tónica sigue siendo la habitual. Respeto entre ambos y el delantero vallecano esperando su oportunidad para poder ayudar al equipo. También es verdad que el punta quiere contar con más minutos, que no le gustó ser el tercer cambio del partido porque creía que podía haber contado con más minutos ante el Levante, pero no hay nada personal con el entrenador. Negredo es consciente de que tiene que marcar muchos más goles para poder limpiar su cabeza y poder despejar todas esas dudas que tiene sobre su futuro en el Valencia.
Pero por lo visto en Paterna, la relación entre Nuno y Negredo sigue siendo de absoluto respeto y atrás queda enterrado el episodio en el que el delantero no festejó su gol, en el que lo celebró en silencio con sus compañeros, pero es verdad que su reacción en caliente de meterse al vestuario sin saludar a la afición y pasando por delante de Nuno sin levantar la cabeza hizo que saltaran todas las alarmas porque se podía interpretar que existía un problema entre ellos. Lo que es verdad es que a Negredo no le gustó ser el tercer cambio y más en un partido en el que estaba todo decidido.