La terapia de Matt Ryan
Nuno está trabajando, dedicándole muchas horas para tratar de equilibrar lo máximo al equipo esta semana, para terminar de ajustar detalles casi imperceptibles, pero se ha propuesto que todos sus futbolistas estén preparados y a pleno rendimiento el próximo miércoles 19 de agosto para afrontar la previa de la Champions. Esta intención de Nuno también pasa por tener en la portería al mejor Matt Ryan y ahí ha comenzado la terapia de José Manuel Ochotorena en el día a día en la Ciudad Deportiva. La llegada a un club nuevo ha supuesto en el meta australiano un cambio en la metodología, también en el sistema defensivo porque se defienden los saques de esquina y las faltas laterales de distinta forma que lo hacía en el Brujas y el entendimiento con los dos centrales es vital. Se vio a Mustafi hablar y corregir a Ryan ante la Roma y es que en todo futbolista existe un periodo de acoplamiento y de asentamiento, y ahí se encuentra Matt.
Pero el papel que están desempeñando Nuno y 'Ochoto' con el australiano va más allá de los táctico, está siendo más complejo, se trabaja en lo psicológico porque Matt debe convencerse de que está en el Valencia y que tiene que dar el mismo nivel que mostró en la Europa League la pasada campaña, en donde aún se recuerdan los partidos que dejó ante el Torino, el Besiktas y el Dnipro. No encajó gol como visitante en la fase de grupos y tan sólo le hicieron seis tantos en los 12 partidos que defendió la meta del club belga, llevando al Brujas hasta las puertas de las semifinales del torneo.
Matt Ryan no acabó contento de su partido ante la Roma, en el que le dispararon en cuatro ocasiones y le hicieron tres goles, aunque tan sólo pudo hacer algo más en el último porque en los dos primeros nada pudo hacer; es más en el tanto de Salah llegó incluso a pararle en dos ocasiones el mano a mano a Gervinho. Pero el australiano se marchó de Mestalla con la sensación de haber fallado, justo en el día de su debut y no fue agradable estrenarse delante de su publico recibiendo tres goles. Ochotorena ha trabajado desde entonces mucho con Ryan porque el entrenador de porteros valencianista conoce muy bien esta estirpe especial que son los guardametas. Ochoto sabe que el portero requiere de una autoestima mayor que el resto para engrandecer su figura debajo de los palos, para que se sienta casi imbatible. Mientras que a los futbolistas de campo se les puede vanagloriar por distintas virtudes, a los porteros se les relaciona sólo con la seguridad, ya sea más o menos ágil, alto o bajo o grite más o menos. Ryan tiene que recuperar esa seguridad que tuvo la pasada campaña porque muchas de sus intervenciones en el Valencia vendrán dadas por experiencias que aún recuerde de los partidos en los que triunfo, es decir, por ejemplo debe recordar aquel mano a mano lo ganó porque hizo esto o que tiene que poner un futbolista más en la barrera porque ya le pasó aquello...
Ochotorena sabe que Matt debe sentirse imbatible, que lo para todo porque es la única manera de que muestre la misma versión del Brujas. En cada acción el portero se enfrenta de manera inconsciente a una tesitura: "la paro o me la cuelan". Hay un 50% de porcentaje a priori, pero con mucho trabajo de campo y mental, los técnicos consiguen que el portero cambie ese porcentaje a un 80%-20%; ese es el gran reto que tienen los entrenadores de porteros, ya que las probabilidades de parar un balón son más altas si se piensa que lo detienes. Ryan debe sentirse capaz de superar cualquier situación de partido, mostrarse seguro y capacitado de cumplir con las expectativas depositadas en él. Ochotorena y Nuno le están dando mucha tranquilidad al meta ché porque saben lo importante que es para este equipo, aunque en el otro lado de la balanza está el reto de sustituir a una pieza clave como Diego Alves y rendir bajo presión en la previa de la Liga de Campeones.
La llegada de Ryan se produjo un poco más tarde de los deseado por el técnico luso, ya que le hubiera gustado contar con él desde el primer día de la pretemporada, por eso ahora hay que ganar tiempo al tiempo y están trabajando duro con él. El idioma también es un handicap para entenderse con el resto de futbolistas dentro de campo, pero a hay otras muchas cosas a favor: es un meta que se ha criado como un portero sudamericano, ya que su mentor en Australia fue portero que estuvo muchos años en Colo-Colo e incluso ganó una Libertadores, por eso sus prestaciones se acercan más al guardameta latino que al anglosajón. Eso facilita mucho el trabajo de Ochotorena, ya que está desarrollando el mismo trabajo que con Diego Alves, de hecho su manera de parar y de comportarse bajo palos es muy similar a la del brasileño, dejan la sobriedad europea a un lado para ser espectaculares en las acciones individuales, en el juego con los pies, en los reflejos y en los saltos. La terapia que están haciendo con él tiene que llevar al australiano a estar en perfectas condiciones físicas y mentales para esos dos partidos ante el Mónaco.