El brazalete le da alas a Negredo... 'in extremis'
Álvaro Negredo lució el brazalete de capitán en Riazor ante el Deportivo de la Coruña y este le ayudo a reencontrarse con el gol a final del choque para salvar un empate que el Valencia CF no mereció por lo que se pudo ver sobre el verde de Riazor.
El vallecano es el primero en ejercer el liderazgo que otorga el brazalete desde que se conoce públicamente el cambio de nombres en la capitanía. Cabe recordar que el pasado jueves en el partido de Copa ante la UD Las Palmas conocimos la decisión de Gary Neville de introducir modificaciones en el reducido grupo de hombres elegidos para asumir la responsabilidad de portar el brazalete de capitán después de ver como fue Paco Alcácer quien lució tan distintivo símbolo en detrimento de Dani Parejo tal y como había sido habitual durante las últimas temporadas.
El '7' estuvo participativo durante el choque, sin embargo no fue hasta el final cuando encontró la suerte del gol. En el minuto 11', el ariete tuvo un gran oportunidad tras un contragolpe que le dejó en una situación privilegiada en el interior del área deportivista pero Negredo cruzó en exceso y su potente disparo se marchó por poco. Algunos minutos más tarde, se asoció bien con Parejo al que asistió de manera pero el de Coslada no llegó a controlar ante la oposición de la zaga blanquiazul. El vallecano lo siguió intentado a lo largo del choque pero la fortuna le fue esquiva hasta el último momento cuando consiguió cabecear un buen centro lateral de Parejo para establecer el empate definitivo. La fortuna le fue esquiva hasta el último momento cuando consiguió cabecear un buen centro lateral de Parejo para establecer el empate definitivo.
No es la primera vez que el delantero de Vallecas asume tal responsabilidad. En la vuelta de los octavos de final de la Copa en Granada, ya fue el elegido para desempeñar esa función que representa la prolongación del mister sobre el terreno de juego. La decisión de Neville radica en valores como la experiencia, el carácter y la importancia dentro de un vestuario en el que el capitán debe ser un ejemplo para el resto de jugadores. En aquella ocasión fue una decisión improvisada con la que Gary quiso darle galones al Vallecano para provocar un arreón en su estado de ánimo. En cambio en Riazor, Negredo fue el único de los nuevos capitanes que participó en el choque por lo que no había lugar a debate cuando todavía no se ha definido, al menos de forma pública, el orden de los cuatro elegidos. El resto, Paco Alcácer, Diego Alves y Javi Fuego, ni siquiera viajaron a tierras gallegas al estar recuperándose de sus respectivas lesiones.