Después de largos meses de duro trabajo, el portero del Valencia CF, Diego Alves, ya está recuperado al 100% de la grave lesión que sufrió en su rodilla para volver a competir al más alto nivel. El proceso de recuperación ha sido arduo y costoso para el meta brasileño que ha tenido que pasar por diferentes fases para afianzar su articulación y que ésta volviese a ser aquella que le ayudó a convertirse en uno de los mejores porteros del mundo hace no demasiado tiempo. Diego Alves ha trabajado como un auténtico jabato para volver con garantías y aunque lleva algo más de un mes entrenándose con el resto de sus compañeros al mismo ritmo, no ha sido hasta esta semana cuando el cancerbero brasileño ha recibido el alta médica para volver a sentirse futbolista.
Diego Alves llama a la puerta del técnico Gary Neville porque ya está totalmente en condiciones físicas de regresar a una convocatoria. De hecho, si no lo hace, es por razones estrictamente técnicas puesto que los problemas físicos ya son parte del pasado para el brasileño.
Desde aquel 24 de mayo en el que el portero se rompió el ligamento cruzado anterior de la rodilla derecha en el trascendental partido del Valencia CF en Almería en el que el equipo se jugaba su vuelta a la Liga de Campeones, Diego Alves ha vivido momentos muy complicados no sólo en lo físico sino también en el plano mental, pero su fortaleza y sus ganas de volver a ser el que era, han sido claves durante todo este tiempo. A partir de ahora, si Alves no entra en la convocatoria es por razones estrictamente técnicas puesto que los problemas físicos ya son parte del pasado para el brasileño.
El brasileño se encomendó al médico de la selección brasileña para someterse a la intervención quirúrgica de su rodilla derecha. Afortunadamente para el valencianismo, todo salió bien y a partir de entonces comenzó la 'cuenta atrás' para volver a disfrutar de Diego Alves defendiendo la portería valencianista otra vez. El meta brasileño pasó la primera fase de su recuperación en su país natal bajo la supervisión de sus médicos de confianza. En las primeras semanas Diego ocupaba su tiempo realizando ejercicios de activación de la rótula y recuperación de la flexión de la rodilla. Estas semanas iniciales, dejaron paso a las sesiones de entrenamiento propioceptivo para potenciaer la musculatura de la zona afectada y recuperar la fuerza al 100%. La evolución de la lesión era favorable a lo largo de las primeras semanas, así lo acreditaban las revisiones periódicas a las que se sometían el jugador.
Alves continuó con su recuperación en Valencia bajo la tutela del los servicios médicos del club de Mestalla que pudieron comprobar el buen trabajo del brasileño durante la primera fase en su país. Diego Alves no desaprovechó la oportunidad de mostrar a los aficionados valencianistas que tantas muestras le habían enviado, lo bien que marchaba su recuperación y lo pronto que podría volver a disfrutar del fútbol.
Así, continuaron meses de intensas jornadas de trabajo para Diego con la mente puesta, únicamente, en acortar plazos para volver a los terrenos de juego. La incansable voluntad de Diego y la predisposición total daban sus frutos.
La incansable voluntad de Diego y la predisposición total fueron claves en la recuperación A principios del mes de diciembre, Alves volvió a calzarse las botas y a enfundarse los guantes para realizar trabajo específico. Un momento especial para el brasileño que ya comenzaba a ver la luz al final del túnel.
A la vuelta de las vacaciones de Navidad, el equipo recibió la gran noticia del regreso del brasileño a los entrenamientos con el resto del grupo. Diego Alves volvió y de qué manera, ofreciendo recitales de paradas como acostumbraba antes de la lesión. El brasileño volvía con ganas y fuerza pero por delante todavía quedaban semanas para poner la maquinaria a punto y coger buen tono físico. Diego volvía a sonreír otra vez pues su regreso definitivo estaba cada vez más cerca. Un proceso de recuperación que culminó el pasado miércoles con una prueba de fuego. Alves volvió a disputar un partido ocho meses después. Fue en un amistoso entre el Juvenil y el filial valencianista en el que la respuesta del brasileño fue muy buena y pudo comprobar el estado de su rodilla y el de su confianza.
Después de todos estos meses y todo lo que ha tenido que pasar el jugador, los informes que manejan los servicios médicos y el cuerpo técnico son muy positivos, así como las sensaciones del jugador que está como loco por volver a entrar en una convocatoria y volver a ayudar al equipo.
Así pues, la fecha estimada para el retorno de Diego Alves se estableció para principios de 2016. Los médicos abogaban por la cautela y en sus pensamientos situaban su vuelta a finales de este mes de febrero. El propio jugador, asumía algo más de riesgo apostando por volver en enero. Finalmente, gracias al trabajo de los galenos y a la implicación y compromiso del jugador, la vuelta de Alves en estos primeros días de febrero es una realidad. Ahora tan sólo le queda ganarse la confianza del técnico para volver a defender la portería del Valencia CF y ser otra vez ese gran guardameta que deslumbró a todo el valencianismo.
La idea que se maneja es que Alves esté dos semanas forzando para ver en qué situación se encuentra tras un largo periodo de inactividady entrar de lleno en la lucha fraticida por ser el portero del Valencia. La tarea no es sencilla. Enfrente se encuentra con Jaume Doménech, que protagonizó una fulgurante aparición en escena siendo el mejor del equipo en una decena de partidos y Mat Ryan, que finalmente le ha quitado el puesto al de Almenara ya que cada vez que jugó rozó un nivel muy alto.