El Valencia le devuelve la afrenta al FC Barcelona

El Valencia CF consiguió un triunfo apoteósico ante el FC Barcelona y ganó contra todo pronóstico en el Camp Nou. Los valenciansitas se vengaron de la derrota copera y complican seriamente la Liga al FC Barcelona. En una primera parte en la que los azulgrana pudieron golear, los de Pako Ayestarán supieron aguantar con un Diego Alves pletórico y convertir en gol dos contras gracias a Siqueira y Santi Mina. Ya en la segunda, con un Barcelona volcado, y que marcó el 1-2 por mediación de Messi, el equipo ché supo aguantar y sumar tres puntos que prácticamente le garantizan su permanencia en Primera.  

 
Con pausa el Valencia defendió mejor, sufrió menos y tuvo la calma suficiente para gestionar los nervios de un Barcelona que veía como la Liga se le escapaba con el 0-2 de Santi Mina. En la quizá mejor jugada del Valencia en meses, el equipo movió y movió la pelota hasta que dejó a Parejo sólo ante su par. El madrileño hizo un pase filtrado para que Mina, llegando desde atrás, batiera con sutileza a Bravo. 0-2 y jugadores al túnel de vestuarios.      
El Valencia salió con su clásico sistema (1-4-1-4-1) pero con un nueve con Santi Mina en punta y Rodrigo Moreno y André Gomes en las bandas para buscar las contras rápidas en el Camp Nou. Dani Parejo y Enzo Pérez formaron la primera línea de contención, mientras que Javi Fuego era el stopper por delante de la línea de cuatro.
Trabajo no les iba a faltar, pues el Barça quería ir a por el partido desde el primer minuto. El acoso fue incesante y en el 6 Messi pudo y debió inaugurar el marcador, pero Alves desbarató su remate cuando el argentino se había quedado absolutamente solo. Poco después era Luis Suárez el que gozaba de su oportunidad.
Las bandas del Valencia eran un coladero y Neymar, esta vez por el centro, se quedó de nuevo sólo ante Diego Alves. El meta internacional del Valencia volvió a volar para sacar con un palmeo la vaselina de su compatriota que ya se colaba. En un cuarto de oro la tripleta ofensiva del Barça había destapado todas las vergüenzas de un Valencia que balbuceaba ante el potencial del rival.
Una contra aislada pasado el primer cuarto de hora permitió a Rodrigo quedarse sólo ante Bravo pero que tiró fuera por poco. El hispano-brasileño está gafado. El encuentro estaba planteado: el Barcelona iba a dominar y el Valencia iba a salir a la contra las pocas veces que pudiera.
Por eso, la ocasión de Rodrigo fue un islote aislado en el dominio catalán, que siguió como un martillo pilón acosando la meta valencianista. No había transcurrido ni media hora y Luis Suárez volvía a tener una ocasión; después era Messi el que obligaba a Alves a hacer una palomita espectacular y así seguía acumulando ocasiones sin éxito. 
Por el contrario, el Valencia, en una contra conducida por André Gomes hacía llegar el balón a Siqueira. El brasileño, mejor de interior que de lateral, centraba con tan buena fortuna que Rakitic desviaba el balón a la red. 0-1 y a sufrir.
El gol le dio el poso que necesitaba el equipo para asentarse en el terreno de juego. Con pausa el Valencia defendió mejor, sufrió menos y tuvo la calma suficiente para gestionar los nervios de un Barcelona que veía como la Liga se le escapaba con el 0-2 de Santi Mina. En la quizá mejor jugada del Valencia en meses, el equipo movió y movió la pelota hasta que dejó a Parejo sólo ante su par. El madrileño hizo un pase filtrado para que Mina, llegando desde atrás, batiera con sutileza a Bravo. 0-2 y jugadores al túnel de vestuarios.    

Habría que sufrir en la segunda parte

Ni los más optimistas en el valencianismo esperaban un escenario tan positivo al descanso. 
El Barcelona salió en tromba en la segunda parte, pero nervioso e impreciso, con prisas y eso favorecía a un Valencia que supo defenderse como un gato panza arriba y tener sus ocasiones para ampliar la ventaja y alejar el peligro de su meta. 
Con solidaridad y garra el Valencia parecía otro, pero el cansancio empezaba a hacer mella en las huestes valencianistas y Pako Ayestarán sacó a Paco Alcácer por un fundido Santi Mina. 
Sin embargo, quien golpeó ante el cambio valencianista fue el Barcelona. En una de sus innumerables jugadas, Alba ponía el balón atrás para que Messi, llegando por el centro, anotaran el 1-2. Quedaban veinticinco minutos de sufrimiento por delante. El conjunto azulgrana, arengado por el gol -el 500 en la carrera de Messim qué casualidad- fue a por el empate denodadamente.  

Fueron los peores momentos del equipo. El Barcelona es un gran rival y con ganas es difícil de parar. Ayestarán tenía que mover sus filas porque el partido se le iba y sacó a Joao Cancelo por Enzo Pérez, que volvía a ser titular después de muchas semanas lesionado. Cancelo jugó de interior derecho, por delante de Barragán, para seguir buscando las contras y evitar que llegara el segundo tanto catalán por esa banda. 
La respuesta del Barça fue un balón interior para Rakitic que, a la media vuelta sacó la enésima parada de Diego Alves. El brasileño estaba inconmensurable.
Los minutos pasaban y el milagro parecía más cercano cada vez. Eso sí, como en la primera mitad, el Barcelona tenía encerrado al conjunto de Pako Ayestarán que, sin embargo, gozó de alguna contra que debieron sentenciar. Paco Alcácer, sin ir más lejos, debió hacer el tercero en el 86, pero sólo ante Bravo remató incomprensiblemente mal.
Gayà, que regresaba tras lesión, sentó a Rodrigo Moreno, fundidísimo y tuvo el honor de estar al final del encuentro cuando el colegiado pitó y sancionó la gran victoria valencianista en el Camp Nou.