El resumen (I) La Champions: primer "guantazo" del año
Durante todo el fin de semana, en ElDesmarque Valencia vamos a repasar de forma somera la trayectoria del Valencia CF en la presente campaña. Será un resumen dividido en cuatro partes, una por cada una de las competiciones en las que el equipo ha participado esta campaña. Comenzamos con la Champions League.
La actuación del Valencia CF en la Champions League fue cuanto menos decepcionante. El equipo regresaba a la máxima competición europea después de tres años sin disputarla y cayó a las primeras de cambio de manera inesperada.
Hubo que sudar tinta para certificar la clasificación
El equipo dirigido por Nuno Espirito Santo centró la temporada anterior en clasificarse para la Liga de Campeones y hasta el último suspiro no lo consiguió. En la última jornada, un gol de Paco Alcácer a falta de diez minutos selló la cuarta plaza que tan sólo daba el billete para jugar la previa.
El Mónaco fue el último escollo para estar presente en el bombo de los 32 equipos que disputarían la competición. Un 3-1 en Mestalla en el partido de ida dejaba encarrilada la eliminatoria. Más aún cuando a los cinco minutos del encuentro de vuelta Negredo puso el 0-1 en el marcador con una obra de arte. La única conocida con la camiseta del Valencia. Pero sufrir está en el ADN valencianista y este partido no fue menos. El equipo monegasco remontó el partido y los últimos 20 minutos tuvo contra las cuerdas al equipo valenciano. Al final, 2-1 y pase para el sorteo de Nyon. El himno de la Champions volvería a sonar en Mestalla.
Merecida eliminatoria a la primera de cambio
En septiembre el Valencia regresaba a la Champions League, competición reservada para los grandes equipos de Europa, lugar del cual nunca debió marcharse. Con la ilusión por las nubes, poca gente pensaría en un final tan decepcionante cuando el Valencia cayó en el grupo más sencillo de todo el sorteo. La afición daba por sentada la clasificación y el batacazo fue sonrojante. Zenit de San Petesburgo y el "todopoderoso" Gante belga fueron los rivales que de golpe y porrazo apearon al club valencianista de los Octavos de Final.
Cuando lo más difícil era echar por tierra la ventaja que se había conseguido, el Valencia decidió inmolarse deportivamente.
El primer partido de la fase de grupos fue premonitorio. El Zenit visitó Mestalla e hizo un alarde de efectividad. El equipo ruso ganó 2-3 con tres disparos a puerta y obligaba a los valencianistas a sumar sí o sí en los partidos venideros.
Y así lo hizo. Tres puntos en Lyon y en casa contra el Gante dejaban todo a favor. Cuando lo más difícil era echar por tierra la ventaja que se había conseguido, el Valencia decidió hacerse el "hara-kiri". El Gante avergonzó al equipo en Bélgica en el partido que podía haber supuesto la clasificación, y la jornada siguiente el Zenit, ya clasificado, acabó de tocarle la cara. Solo un tropiezo del Gante le permitía el pase a Octavos.
Pero ni por esas. El Olympique de Lyon, que no se jugaba nada, acabó de hundir la imagen del Valencia en el torneo. 0-2 en el debut de Gary Neville en el banquillo de Mestalla. Lamentablemente, los siguientes partidos del inglés en la banqueta tampoco fueron mucho mejor.
El Valencia se despidió de la Champions League de manera indolente. Su trayectoria en la competición no fue menos y la eliminación fue una puñalada a la piedra angular del proyecto de Peter Lim.
La nota positiva: Jaume Doménech
Si hubo alguien que salvó los muebles en la Champions fue Jaume Doménech. El portero de Almenara aprovechó la oportunidad tras las lesiones de Diego Alves y Matt Ryan y evitó partido sí partido también que la eliminación del Valencia fuera más temprana. Su actuación en la competición fue espectacular y fue la mejor noticia en un equipo depresivo.