Hoy se cumple un año de la humillante goleada que sufrió el Valencia CF en el Camp Nou en el partido de ida de las semifinales de Copa del Rey. Un contundente 7-0 con el que el conjunto de Gary Neville fue humillado y protagonizó el mayor ridículo de los de Mestalla desde aquella noche de Karlsruhe en 1993.
En 29 minutos, el Valencia perdía 3-0 gracias a los tantos de Luis Suárez (2) y Messi, protagonizando los peores minutos de la era Neville, de la temporada y probablemente de los últimos años. De nuevo Messi y Luis Suárez con dos más cada uno redondearían una goleada humillante para el Valencia (7-0).
Gary Neville decía en la previa de ese encuentro que sus jugadores estaban preparados para partidos de tal importancia. Una vez más se equivocaba el técnico. Un Valencia agazapado, con cuatro laterales sobre el campo -Siqueira y Cancelo jugaron por delante de Gayà y Barragán- y un nueve de referencia como Rodrigo, compareció en el Camp Nou. La vitola de víctima era evidente desde el pitido inicial.
El balón apenas le duraba unos segundos al Valencia, encerrado atrás y un muñeco en las garras de su rival. El 7-0 fue un resultado tremendamente doloroso para la afición valencianista, el mayor ridículo de los de Mestalla desde aquella noche de Karlsruhe en 1993.
El Valencia recibía las acometidas del Barça sin capacidad de reacción. Una noche del 3 de febrero de 2016 en la que el conjunto valencianista sucumbió en manos del FC Barcelona.