El delantero gallego del Valencia CF, Santi Mina, mantiene en vilo al valencianismo tras caer lesionado este sábado en el enfrentamiento ante el Betis. En un lance del juego, Mina se lanzó sobre el césped bético para ayudar en tareas defensivas y sufrió un percance en su rodilla de la pierna izquierda que le impidió seguir jugando y tuvo que ser sustituido por Simone Zaza. Las primeras exploraciones de los servicios médicos intuían que podía tratarse de un esguince de los ligamentos de la rodilla pero no será hasta este próximo lunes cuando se conozca el alcance exacto de la lesión y la naturaleza de la dolencia que padece el ariete.
En la vuelta al trabajo del equipo este domingo, Santi Mina se ha personado en la Ciudad Deportiva de Paterna para reunirse con el jefe de los servicios médicos valencianistas y valorar así las sensaciones y el dolor por parte del jugador. Se ha convenido que lo mejor es esperar a este lunes para que la inflamación remita y que las pertinentes pruebas médicas ofrezcan un diagnóstico más acertado.
Tras la primera exploración le diagnosticaron que sufre un esguince de rodilla
Corría el minuto 60 de partido cuando el delantero gallego presionó hasta el último centímetro y en una jugada en la que fue a tapar el pase de Rubén Pardo, se le quedo la pierda detrás, se enganchó con la bota izquierda del jugador bético y eso provocó que se abriera de piernas en un gesto anti natural que le provocó un fuerte dolor en su rodilla izquierda. Tras la primera exploración le diagnosticaron que sufre un esguince de rodilla.
De esta manera, Voro pierde a un jugador muy importante ya que su despliegue físico y trabajo es fundamental para la presión adelantada que quiere ejercer el equipo frente a sus rivales. Además, es el delantero que ha estado más acertado de cara a portería en el último mes de competición, lo que convierte la baja de Mina en una ausencia sensible para el grupo.