Junio de 2010, Mateo Alemany, santo y seña del RCD Mallorca hacía un último favor a la causa balear y vendía el club a un grupo encabezado por el entrenador Lorenzo Serra Ferrer, ex técnico del propio club, Betis, FC Barcelona y AEK de Atenas, por unos dos millones de euros. El director general del Valencia CF ponía así fin a su segunda y, hasta la fecha, última etapa al frente del Mallorca. El de Andratx vendía al de Sa Pobla, que cinco años después arrojaba la toalla ante la imposibilidad de reflotar un club económica y deportivamente hundido, pero eso es sólo una de las historias más que Serra Ferrer le puede contar a su amigo y compatriota Alemany cuando este domingo coincidan en el palco del Benito Villamarín dónde, casualidades de la vida, los dos mallorquines más influyentes en el fútbol actual volverán a cruzarse sus caminos. Uno, como director general del Valencia; el otro, como vicepresidente deportivo del Real Betis.
Mareo Alemany, que estuvo desde 1989 hasta 2010 vinculado al Mallorca , conoce a Serra desde su estreno en el club. No en vano, por aquel entonces el técnico bermellón era un Serra Ferrer que había ascendido al equipo en el 86 y que, tras un año alejado del banquillo, volvió para clasificar al Mallorca para su primera Copa del Rey en 1991. Fueron años felices. El comienzo de la etapa más dorada en S'Illa y Alemany Serra mandaban; uno en el despacho, el otro en el campo.
La relación profesional se acabaría en 1993, cuando Serra se desvinculó del club rojillo; dónde Alemany siguió creciendo hasta convertirse en Presidente en dos etapas. La primera de ellas entre 2000 y 2005, en la que el Mallorca rozó la excelencia, ganó una Copa del Rey (2003) y con el equipo en la Liga de Campeones.
Sin embargo; no sería hasta la segunda etapa de Alemany, más corta y mucho menos exitosa -entre 2009 y 2010-, cuando los dos mallorquines y mallorquinistas volvían a cruzarse en el camino. La paupérrima situación del club le llevó a presentar a Alemany un Concurso de Acreedores y, posteriormente, resolver la venta de la mayoría accionarial a un Lorenzo Serra Ferrer que volvía en plan directivo, no ya como entrenador tras haberse sentado en los banquillos del Barça, el Betis y el AEK Atenas. "Mateo Alemany forma parte de la historia de la entidad, y como tal puede ayudar mucho en esta etapa de transición", dijo el día de traspaso de poderes Serra Ferrer.
Serra se desvincularía del fútbol hasta que, casi como Alemany, volvería este 2017 a primera línea. El valencianista lo hizo en enero, para coger con mano firme las riendas de un Valencia CF que iba a la deriva; el bético fue anunciado en mayo de 2017 como vicepresidente deportivo de un Betis que, como los de Mestalla, van viento en popa en la competición liguera. De eso, y de toda una vida juntos, podrán hablar hoy Alemany y Serra en el palco, dónde se vivirá el duelo más amistoso del domingo.