Ventajas e inconvenientes de forzar a Zaza ante el Espanyol

El nuevo aviso que le ha dado su rodilla a Simone Zaza mantiene en vilo al valencianismo en general y el cuerpo técnico y servicios médicos están muy pendientes del estado físico del italiano para obrar en consecuencia y no asumir ningún riesgo que pueda generar alguna lesión más importante al jugador. Zaza llegó este martes por la tarde a Valencia y a lo largo de este miércoles se somete a pruebas médicas para conocer el alcance exacto de unas molestias que le impidieron participar en la trascendental repesca de Italia en la que la azurra fracasó estrepitosamente no clasificándose para el mundial. Por el momento, el futbolista fue uno más en la sesión de trabajo de este miércoles.

Dependiendo del resultado de las pruebas, la decisión de que Zaza pueda jugar o no el domingo ante el Espanyol dependerá de del acuerdo conjunto entre el propio futbolista, Marcelino y los galenos del club a quienes les preocupa el estado de esa maltrecha rodilla en la que Zaza está teniendo molestias de manera constante. Todo un dilema para Marcelino ya que en cualquier caso, la situación tiene ventajas e inconvenientes. 

Ventajas

Si finalmente Zaza está para jugar, el equipo se beneficiará de su carácter y del empuje habitual al que acostumbra. No sólo destaca su olfato goleador, el cual ha sacado a relucir en este primer tramo de temporada. Además, Zaza ayuda y trabaja para el equipo. Se pega con todos y no rehuye ningún combate cuerpo a cuerpo. Con todo lo demostrado hasta ahora, su sola presencia en el once ya es una advertencia para los defensores rivales que se emplearán a fondo para dejar inédito al italiano. Esto podría ofrecer alguna oportunidad al resto de sus compañeros. En el último partido ante el Leganés, Zaza no marcó pero su gran estado de forma en el apartado goleador le convierte en un arma muy importante para el Valencia CF. 

Inconvenientes

Por contra, si juega Zaza, evidentemente existe un componente claro de riesgo por el que las molestias podrían agravarse o incluso derivar en una lesión más complicada. Si no para Zaza, el Valencia CF asume el riesgo de que el italiano no pudiese jugar en el siguiente partido ante el Barça en el que se espera todo un partidazo en Mestallla el próximo 26 de noviembre.