Rober Ibáñez deja de ser oficialmente jugador del Valencia CF para marcharse traspasado al Getafe CF, que a su vez lo cede a Osasuna, tal y como ha venido informando ElDesmarque en los últimos tiempos. Eso sí, el conjunto de Mestalla se reserva una opción de compra. Se acaban así sus infructuosos esfuerzos por hacerse un hueco en la primera plantilla a las órdenes de Marcelino García Toral.
El Valencia, el Getafe y el Osasuna lo han anunciado a través del siguiente comunicado:
"El Valencia CF ha completado un acuerdo con el Getafe CF para el traspaso de Rober Ibáñez al club madrileño, que a su vez cede al futbolista al CA Osasuna. Dicho acuerdo contempla una opción de recompra por parte del Valencia CF."
Comunicado Oficial https://t.co/79Efyl0KjC
— Valencia CF (@valenciacf) 3 de enero de 2018
El extremo valenciano ya se entrenó hoy con Osasuna y será presentado después de que ayer pasara las pruebas médicas en Tajonar.
El Valencia se queda una opción de recompra hasta 2020 y un pequeño porcentaje de una futura venta.
Rober Ibáñez tiene un mensaje para la afición rojilla. Al término del entrenamiento matinal, será presentado en Tajonar. #RoberIbáñezRojillo #RoberIbáñezGorritxo pic.twitter.com/wJIuwgiAxj
— C. A. OSASUNA (@CAOsasuna) 3 de enero de 2018
Rober Ibáñez apenas estaba teniendo protagonismo en el Valencia CF a las órdenes del técnico asturiano. El canterano no ha gozado de minutos y sólo pudo vestirse de corto en el partido de vuelta de la eliminatoria de Copa del Rey contra el Zaragoza. Incluso se ha quedado fuera de las convocatorias en favor de Ferran Torres, quien le ha adelantado en la rotación.
Se da la paradoja que únicamente jugó un partido, pero le sirvió para volver a los terrenos de juego como se fue: marcando goles. Fue un 29 de noviembre, justo un año después de aquel fatídico 21 de noviembre de 2016, cuando el extremo derecho valenciano protagonizó la cara y la cruz en el mundo del fútbol defendiendo los colores del Leganés, club en el que estaba cedido por el Valencia CF. En aquella ocasión, Rober le dio la victoria a su equipo con un doblete y sufrió una rotura del ligamento cruzado de su rodilla que lo ha tenido un año de baja.
Ahora, sin el ritmo y los minutos necesarios, el valenciano emigra a Getafe en busca de gloria y minutos y, quién sabe si un pasaporte para algún día regresar al club de sus amores. No en vano, el club se reserva una opción de recompra futura en previsión de que Rober desarrolle todo el fútbol que lleva dentro.
De momento el extremo se va a Getafe y ahora, el conjunto azulón lo envía cedido a Osasuna, para que busque tener continuidad y se encuentre con su mejor estado de forma, después de haber estado un año parado a causa de lesión de rodilla.