Valencia mira al cielo y ya contempla las estrellas de la Champions

El Valencia CF venció en Mestalla al Real Betis Balompié por dos goles a cero en un encuentro en el que fue muy superior a su rival y tras el que se acerca un poco más a la Champions League. Rodrigo en la primera mitad y Zaza nada más comenzar la segunda fueron los autores de los tantos de una victoria que, además, sirve a los de Mestalla para dejar su portería a cero por primera vez desde noviembre. 

Marcelino, se lo podía permitir, salió con el once de gala. Esto es, de inicio formaron Neto; Montoya, Paulista, Murillo, Gayà; Kondogbia, Parejo, Carlos Soler, Guedes; Rodrigo y Mina. Setién, en cambio, salió mucho más arropado, con cinco atrás y tres en el medio para tener superioridad y no dejar maniobrar al Valencia.
Desde el principio el partido se convirtió en una lucha encarnizada entre dos sistemas antagónicos y una misma obsesión: hacer daño con el balón. En este partido táctico el Betis parecía salir ganador. De hecho, al Valencia le costó diez minutos acercarse tímidamente al área de Adán.

Guedes-Rodrigo

El Valencia lo intentaba por las bandas, pero los centros de Carlos Soler y Guedes no econtraban el rematador deseado. El Betis no sufría y lejos quedaba el alocado partido de la primera vuelta... Hasta que Guedes levantó la cabeza. El portugués se sacó un latigazo desde campo propio que dejó a Rodrigo sólo con Bartra. El internacional del Valencia le recortó y batió a Adán con un disparo seco a media altura y lejos del alcance del meta. Una genialidad había desnivelado el choque. Tanto es así que en tres minutos el Valencia montó tres contras que a punto estuvieron de dejar sentenciado el choque. 
La reacción bética fue un tímido disparo de Junior que Neto atrapó sin problemas. 

Mina, KO

El Valencia, sin embargo, olía la sangre, y el árbitro no quiso ver en el 34 un posible penalti de Barragán sobre Rodrigo. Fue una jugada doblemente desgraciada para el Valencia, ya que Mina, sólo, se echó al suelo con la mano en la parte posterior del muslo, y tuvo que ser sustituido por Zaza. Con este marcador ambos contendientes se irían al vestuario. 

Zaza despierta

Pero el Valencia quería solventar el partido por la vía rápida y salió en tromba en la segunda parte. Así, a los dos minutos, Rodrigo probó los reflejos de Adán en otra gran galopada. El balón, despejado en dos instancias por la zaga fue recuperado por Kondogbia en las inmediaciones del área. El francés, viendo a Zaza libre de marca, le puso un balón franco que el italiano bajó con calma y remachó a puerta. Era el 2-0. Mestalla se caía, Zaza volvía a marcar casi tres meses después. No contento con ello, a la siguiente jugada, el italiano fue objeto de un claro penalti por parte de Junior cuando encaraba sólo a Adán. Hernández Hernández, de nuevo, no quiso ver nada. 
El canario, condescendiente con Barragán, enfurecía a Mestalla. Setién lo sentó porque sabía que el ex valencianista se había ganado la roja. Sacó a Francis y después a Rubén Castro por un desaparecido Camarasa. Marcelino, por su parte, sentó a Soler -se marchó ovacionado- y sacó a Coquelin.
El colegiado, mal para ambos, compensó no dando por válido un gol en el que parece que hay falta sobre Neto antes del remate bético. El duelo, sin embargo, estaba dónde el Valencia quería y Marcelino sentó a Rodrigo, que se llevó una de las ovaciones de la noche, para dar entrada de nuevo y minutos de calidad a la joya que viene: Ferran Torres. 
La salida del francés y del joven canterano le dieron otro aire a un Valencia que tuvo ocasiones para ampliar su renta. Sin embargo, el electrónico no se movería. No hacía falta, porque Loren tuvo una buena ocasión para acortar distancias. Valencia que ya huele a Fallas, ahora empieza también a oler y saborear un poco más la Champions. Mestalla, que lo sabe, despidió al equipo desde el centro del campo con una ovación.   
 

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