Cinco cosas que aprendimos del Valencia-Éibar

El Valencia CF no pudo pasar del empate ante el Éibar y se ve obligado a aplazar, al menos hasta este lunes, pero con toda probabilidad hasta el sábado que viene, la fiesta por la Champions League. Todo estaba preparado para que, delante del dueño, el Valencia lograra un triunfo y sumara los tres puntos que necesitaba para clasificarse de forma matemática para la próxima edición de la Liga de Campeones. No pudo ser, los errores propios, y un exceso de vista del colegiado y los linieres, impidieron que la afición celebre un regreso a la élite para el que tenido que esperar dos años y que ahora, por una semana más, le parece una eternidad al valencianismo.

Pocas conclusiones positivas se pueden sacar del duelo entre el Valencia CF y el Éibar, pero sí algunas. El margen que le queda al equipo para conseguir el objetivo. No fue ante el Éibar, pero puede ser ante el Villarreal o incluso estando en casa, si el Betis no gana todo lo que le queda por delante. Destacable también es la prestancia de Neto bajo palos, que semana tras semana se gana estar en la selección de Brasil. También es digna de mención la asiduidad de Peter Lim en Mestalla, prueba inequívoca de que el máximo accionista quiere estar y participar en la confección de la plantilla del Valencia 2018-2019.  
Este año el equipo ha rendido por encima incluso de lo esperado. Ahora toca reforzarlo para que la temporada que viene en Champions League sea la primera de muchas y no un paso fugaz por un lugar, la élite continental, dónde el Valencia puede y debe estar por méritos propios y por historia. Eso sí, la Champions no permite demasiados deslices como el del Éibar y penará tardes en las que, como sucedió este domingo en Mestalla, la falta de puntería sea la tónica habitual.