¿Qué pasa con Jeison Murillo? Esa es una de las preguntas que se hace la afición del Valencia CF en esta recta final de temporada. El central colombiano ha pasado en las últimas semana de ser un jugador titular a ser el cuarto central de la plantilla valencianista por detrás de sus otros tres compañeros en el centro de la zaga, algo que quedó acreditado el pasado domingo cuando Marcelino decidió apostar por Ruben Vezo y no por Murillo para suplir la baja de Garay que estaba sancionado.
La importancia de Murillo en el equipo ha ido disminuyendo considerablemente a lo largo de los últimos meses hasta quedar relegado a un papel totalmente secundario. De hecho, en el último mes y medio tan sólo ha jugado dos partidos con el equipo. El 17 de marzo se enfrentó al Alavés en Mestalla pero saltó al terreno de juego en el descanso. No jugó hasta un mes después, frente al Getafe en Mestalla pero lo hizo en un partido con un once titular plagado de teóricos suplentes. En ese partido, Murillo sufrió la primera derrota con la camiseta valencianista.
Con el jugador no ocurre ningún problema que tenga mayor recorrido que simples decisiones técnicas como se encargó de dejar claro el propio Marcelino García Toral al defender que el colombiano era un "buen profesional". "Con Murillo no ha pasado nada. Tengo poco que explicar. Son decisiones técnicas. Tuvo una operación y es normal que pase por altibajos. Con Murillo no hay ningún problema porque es buen profesional y es respetuoso con sus compañeros y con el cuerpo técnico", arrojó luz el técnico asturiano en la previa del partido en el Camp Nou de hace algunas semanas.
El hecho de que Murillo no entrase de manera consecutiva en dos listas de convocados, ante el Leganés y el Espanyol, levantó suspicacias en el entorno valencianista pero desde el club se quitó hierro al asunto y se habló de un plan específico de trabajo para el colombiano para que recuperase la velocidad que había perdido como consecuencia de la lesión que sufrió. Cabe recordar que Murillo estuvo tres meses de baja por una doble intervención quirúrgica y prácticamente pasó de la inactividad a ser titular con el equipo, algo que ha retrasado su puesta a punto y que le ha impedido alcanzar su estado físico óptimo.