El VAR sentencia a un espeso Valencia (2-0)
El Valencia CF cayó derrotado en su visita al RCD Espanyol por 0-2. A los de Marcelino García Toral les faltó claridad en ataque y contundencia en defensa. Los goles llegarían en la segunda parte. El primero, tras un lanzamiento magistral de Esteban Granero, que fue concedido después de consultar al VAR, y el segundo en una contra tras un error de Piccini, obra de Borja Iglesias. El Valencia, que en la primera mitad dio la cara, desapareció en la segunda.
Diakhaby, la gran novedad
Marcelino no sorprendió a nadie de inicio y apostó por su once de gala. Únicamente entró Mouctar Diakhaby en sustitución del lesionado Garay. El resto, los de siempre; con Mina aguantando de inicio ante las acometidas de los Gameiro o Batshuayi.
Pronto los dos equipos mostraron a qué querían jugar. En especial el Valencia, que saliendo a la contra y presionando en la medular empezó a poner en problemas a los catalanes. Cierto es que con Wass y Soler el Valencia pierde profundidad por banda, pero eso lo suplían Piccini y, sobre todo, Gayà desdoblándose. Así llegó un centro de este que remató Rodrigo de cabeza generando la primera ocasión del partido. Diego López la atajó en la línea de gol. A la siguiente jugara sería Mina el que probara suerte desde fuera.
Aparecen el VAR... y el Espanyol
Precisamente el gallego forzaría que el colegiado solicitara el VAR en el 18. Una nueva internada de Piccini y una filigrana de Carlos Soler pondrían el balón en bandeja a Mina que remataba ante un defensor espanyolista que golpeó con el cuerpo y con la mano el balón. El colegiado, tras consultar el sistema de videoarbitraje entendió que no debía señalar penalti.
El hecho es que el Valencia dominaba el partido, pero no marcaba y el Espanyol se creció. Sergio García obligó a que Neto volara para evitar el gol de cabeza del veterano delantero perico. El meta volvería a actuar poco después tras un gran disparo espectacular de Mario Hermoso. Marcelino se desgañitaba y el miedo le entró en el cuerpo a un Valencia que, a la contra, pudo marcar tras una jugada de tiralíneas entre Kondogbia, Rodrigo y Mina, que fue anulada por fuera de juego de este. Pero lo cierto es que el Espanyol se marchó al descanso dominando y dando la sensación de que podía poner en aprietos al Valencia.
Tras el paso por los vestuarios, la tónica se mantuvo. Neto tuvo que volver a apretar los dientes para sacar un buen balón lanzado por Leo Baptistao desde la frontal. Eran minutos de agobio y Marcelino miró a su banquillo para cambiar la cara a un partido que acababa de complicar Diakhaby con unas manos en la frontal. La falta botada por Granero parecía que botaba en la línea... pero apareció el VAR sentenció que el balón entró.
El Valencia perdía por 0-1 en el 62 y Cheryshev y Gameiro saltaron como una exhalación para darle la vuelta al electrónico por Wass y Mina. Fue en vano. El Espanyol estaba lanzado y Borja Iglesias marcaría el 0-2 en el 68tras un grave error de Piccini, al que Leo Baptistao le cogió la espalda y que sentenciaba el encuentro. El brasileño disparó, Neto rechazó e Iglesias, con la caña preparada, sentenció.
A la desesperada entró Batshuayi completó la terna de cambios, pero el partido estaba sentenciado. Los reajustes en las marcas espanyolistas dejaron a los valenicanistas sin capacidad de reacción.
El punta belga y el francés dejaron algunos detalles pero fueron insuficientes para inquietar a un Espanyol de Rubi que fue mejor que el Valencia de Marcelino.
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