El Valencia CF visita al Real Madrid en el mejor momento posible. El equipo de Marcelino ha recuperado sus constantes vitales en LaLiga Santander y, además, se encontrará con un conjunto merengue en plena guerra civil entre su bisoño entrenador, Santiago Solari, y exjugador del Valencia CF y estrella del equipo y de la selección, Isco Alarcón.
Según publican diversos medios, la ausencia de la convocatoria de Isco en el último partido de la Champions League -viajó a Italia pero lo dejó fuera de la lista- se debe a una falta de respeto. Según avanzó la Cadena Cope, Isco le negó el saludo a Solari en Éibar y ahí nació todo. Según amplía el diario Marca, el gesto de desprecio a Solari se produjo en el vestuario de Ipurúa tras la derrota por 3-0. A este gesto, se le suman otros motivos, como la intensidad en los entrenamientos, que dieron con los huesos de Isco en la grada del Olímpico de Roma.
Precisamente tras el encuentro de Champions contra la Roma, Solari no desmintió un enfrentamiento en rueda de prensa. "La titularidad o suplencia de un futbolista es un problema ficticio", aseguró vagamente el eterno suplente en su época como futbolista del Real Madrid.
"Son decisiones puntuales para momentos puntuales", dijo cuando fue preguntado por Isco. Con todo, respuesta podía leerse más clara entre líneas, en el elogio final a otros compañeros. Reseñó la palabra "compromiso" al hablar de Gareth Bale, "profesional estricto" del trabajo del futbolista y "un ejemplo" cuando lo hizo de Marcos Llorente o "su juego es un reflejo de como se entrena" sobre Lucas Vázquez.
La realidad es que Isco ha jugado 79 minutos en los seis partidos dirigidos por Solari, y ahora llega el Valencia CF con ganas de hacer sangre y de limpiar los tres puntos que separan a ambos equipos en la tabla. El Valencia tiene ante sí el momento idóneo para aprovecharse del movidón deportivo e interno del Real Madrid.