Ferran Torres cumple un año desde que debutó con el Valencia CF y, tras un inicio fulgurante en el que sorprendió a propios y a extraños, este año se ha ido quedando relegado a jugar los minutos finales de los partidos. Un año después de su estreno en la élite con el Valencia -en Zaragoza en Copa del Rey- el jugador pide y necesita a gritos minutos para jugar que en el conjunto de Mestalla de momento no tiene.
Y es que, aunque este año ya ha participado en tantos partidos como la temporada pasada (17), la realidad es que siete de ellos fueron en pretemporada, el trofeo Naranja o choques de carácter amistoso. Si se entra de lleno a analizar sus datos, el joven y valioso extremo derecho ha disputado únicamente 347 minutos repartidos en diez partidos de carácter oficial (7 de Liga, dos de Champions y uno de Copa del Rey).
Se cumple un año del debut de Ferran Torres. A la joven estrella del Valencia CF le está costando entrar en los planes de Marcelino más de lo previsto.
Sus guarismos le permiten seguir siendo uno de los fijos en la sub 19 pero, a diferencia de algún otro compañero de la rojita, el salto a la sub 21 parece una quimera si no adquiere más protagonismo en el Valencia.
Este año Ferran ha debutado en la Champions. Fue titular en Berna en la tercera jornada, después disputó los 90 minutos de la Copa del Rey ante el modesto CD Ebro hace un mes y, a partir de ahí, ha desaparecido prácticamente de los planes de Marcelino. En 30 días ha jugado 40 minutos repartidos en 4 partidos. La otra asignatura que se le resiste a Ferran, además de la continuidad, es el gol. Todavía no se ha estrenado si se exceptúa el que marcó en el amistoso contra el Alcoyano.
Su inicio estruendoso le permitió renovar su contrato dos veces este año. En enero de este año el Valencia le renovaría a bombo y platillo. Firmó hasta 2020, su cláusula de rescisión llegó a los 25 millones de euros, le hicieron ficha del primer equipo, con lo que no puede desde entonces recuperar los minutos que le faltan en la élite con el Mestalla, club por el que apenas pasó. Tres meses después, en abril amplió de nuevo su contrato hasta 2021 y con una clásula de 100 millones de euros. Su futuro está asegurado, pero necesita minutos y con Marcelino ha sido este año titular únicamente en cuatro ocasiones (en tres de ellas fue cambiado). El regreso de Guedes y la recuperación de Coquelin le han cerrado las puertas a un chaval joven que a sus 18 años lo que necesita es jugar minutos.