El Valencia CF aprueba sus cuentas sin oposición y en familia

El Valencia CF como viene siendo habitual desde que Peter Lim es el máximo accionista, ha aprobado todos y cada uno de los puntos que planteaba en su Junta General de Accionistas sin apenas oposición y casi en familia. Apenas 71 accionistas estuvieron presentes en la cita. Ha sido el último capítulo de una Junta que empezó con el discurso del presidente, continuó con las quejas de los accionistas y la Curva Nord, y acabó con la réplica del club a cargo de Mateo Alemany. Ninguno ocultó la negativa realidad del club y, aunque no arrojaron luz sobre los problemas capitales de la entidad, sacaron adelante todos los puntos del orden del día con un 83.09% de las acciones del club a favor.

Así, el Consejo ha conseguido que la Junta le apruebe cerrar el año con 36 millones de pérdidas (acumula casi 1y un presupuesto para el Valencia 2018-2019 es de 171 millones de euros, de los cuales buena parte salen de televisión (72), otros tantos de ingresos por competiciones (65), por abonados y socios (13.8) y casi 15 millones de euros más por publicidad. El 83,09 del total del capital social del club.

Dentro de ese presupuesto de gastos se refiere, hay que destacar que el coste de la plantilla es de 107 millones de euros, el del personal no deportivo de asciende a más de 11 y que el Valencia prevé vender jugadores por valor de 42 millones de euros para cuadrar sus cuentas.Cantidad que, si el equipo no se clasifica para Champions, se verá aumentada, tal y como reconoció el presidente Anil Murthy a ElDesmarque Valencia.

El resultado contable ha propiciado que, al margen de estos datos, el Valencia haya aprobado sin oposición posible la reducción de capital social en 65 millones de euros, entre otras cosas para paliar las pérdidas previstas de 42 millones de euros. La deuda del club se dispara y ya supera ampliamente los 300 millones de euros.

"Pone en orden nuestra estructura contable. Los accionistas no pierden ningún valor neto en las acciones", explicaba Murthy para justificar el último punto del orden del día sometido a voto: La reducción de capital social.

Así, para evitar un colapso, el club aprobó la reducción el capital en 65 millones de euros: es una medida contable obligatoria pues el patrimonio neto de la entidad baja hasta los 45 millones de euros, cifra que se "sitúa por debajo de las dos terceras partes de la cifra de capital social", explica el auditor del club.

Para conseguirlo se ha aceptado bajar el precio nominal de las acciones de los 24.16 euros actuales a 6 euros. Según el club esta reducción no supondrá "disminución alguna del valor patrimonial" de las acciones en el capital social. Finalmente el capital social quedará fijado en 21.5 millones de euros representado por 3.598.596 acciones con 6 euros de valor.

A modo anecdótico cabe señalar también que se ha aprobado la reducción del número de consejeros (de nueve a ocho) por la marcha de Auxiliadora Borja y la reelección de Ernst & Young como auditores.