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La madrugada de Aimar y otras anécdotas del mercado de invierno

Pablo Aimar. (Foto: Valencia CF)
Francisco Ortí / David Torres

El mercado de invierno, por su idiosincrasia, por estar situado en mitad de la temporada y por las urgencias que suscita en los equipos, está plagado de anécdotas. El caso del Valencia CF no es una excepción. El fichaje de Aimar de madrugada, el refuerzo de Maksimovic que sirvió de epitafio a Suso García Pitarch, la confusión con Senderos o el aplazamiento de Nicolás Otamendi son algunas de ellas. Los fichajes del Valencia CF en invierno dan para escribir un libro.

En el mercado de invierno del Valencia CF ha habido de todo. Jugadores que fueron un rotundo éxito y otros que significaron un estruendoso fracaso. Al margen del resultado deportivo, muchas de las operaciones realizadas en este período -regularizado oficialmente a partir de 1994- han dejado anécdotas y detalles muy curiosos.

Pablo Aimar se cerró de madrugada

Pablo Aimar, jugador imborrable del doblete y futbolista que aún hoy en día venera Mestalla, fue durante muchas temporadas el fichaje más caro de la historia del club. Su contratación, siendo una estrella de River Plate, no fue nada sencilla. Hasta el punto que sólo pasadas las dos y media de la madrugada de un 30 de enero de 2001, los dos clubs dieron por cerrado el traspaso. Cómo sería la cosa que Aimar, nada más aterrizar en España reconoció; "Temí un poco que finalmente no se llegara a un acuerdo, pero al final todo se resolvió felizmente".

Pablo Aimar. (Foto: Valencia CF)

El fichaje del astro argentino se había cerrado el último día de mercado, un denominador muy común en estos casos.

Nicolás Otamendi llegó... pero tuvo que irse

En el invierno de 2014 se produjo otra curiosa circunstancia. Con Amadeo Salvo como presidente y Rufete a los mandos de la dirección deportiva, llegaría Nicolás Otamendi procedente del Oporto. Hasta ahí, todo normal. El detalle es que el Valencia CF ya tenía tres jugadores extracomunitarios en su plantilla y no podía inscribirlo. Los casi 15 millones de euros que el Valencia estaba dispuesto a pagar por él lo convertían en una operación de mercado extraordinaria. Por eso, el conjunto de Mestalla hizo un requiebro y buscó una solución alternativa. El club anunció su fichaje un 5 de febrero de 2014 y lo cedió durante seis meses al Atlético Mineiro de Brasil donde disputó parte del campeonato brasileño y la Copa Libertadores hasta los octavos de final, y hasta su definitiva incorporación al Valencia. Sería en agosto de ese año cuando el afamado central debutó, siete meses después de lo inicialmente previsto.

Otamendi en su etapa como valencianista. (Foto: Valencia CF)

Precisamente el hecho de que Otamendi tuviera que buscarse acomodo antes de fichar en el Valencia CF, provocó la llegada de otro central, Senderos, y su consiguiente anécdota.

Senderos no era Senderos

El Valencia compartió una foto de un jugador que no era Senderos. (Foto: Colgados por el fútbol)

Y es que, la premura y la cantidad de fichajes que realizó el Valencia CF en el invierno de 2014 propició una de las anécdotas más curiosas en la historia del club. De nuevo sucedió el último día de mercado. En esta ocasión fue cuando el Valencia anunció el fichaje de Phillippe Senderos procedente del Fulham inglés.

Las horas, las prisas, el error humano dejó un detalle más que curioso. El Valencia CF anunció el fichaje del internacional suizo con una foto que no era la suya, sino la de Brede Hangeland, internacional noruego que también jugaba en el Fulham esa temporada.  

Como dato curioso, cabe recordar que ese mismo día el Valencia CF fichó a Vinicius, cedió a Banega y traspasó a Sergio Canales. Ahí es nada.

Maksimovic se quedó sin valedor y sin contrato

La última anécdota se produjo recientemente. Eran los últimos días de Suso García Pitarch en el cargo. El exdirector deportivo firmó a Nemanja Maksimovic en enero con la intención de incorporarlo de forma inmediata aunque le quedaban seis meses de contrato con el Astana. Todo estaba hecho, pero la aparición en escena de Prandelli poco tiempo antes, paralizó el fichaje, pues el Valencia tenía que pagar 300.000 euros si quería que el serbio se incorporara de forma inmediata. El técnico italiano se marchó dejando empatanado ese acuerdo y otros.

"Era un fichaje para julio, no para el mercado de invierno. Para que viniera ahora habría que negociar con el Astana, y lo que queríamos era negociar con el agente para julio". reconoció García Pitarch días antes de dimitir y dejar, eso sí, el acuerdo cerrado por un jugador que no vio debutar.

A Maksimovic lo ficharon Layhoon y García Pitarch y lo presentaron Anil y Alesanco.

El futbolista tuvo que quedarse en el Astana condenado al ostracismo pues su club, al saber que llegaría libre al Valencia CF en verano, lo dejó sin jugar. Al jugador lo firmaron Layhoon y García Pitarch y lo presentaron Anil Murthy y Alesanco.

Aquel mercado de invierno del 17 fue especialmente movido. La espantada de Prandelli y García Pitarch dejó en manos de Alesanco y Vicente Rodríguez la contratación de dos futbolistas como son Zaza y Orellana. El chileno, dato curioso y anecdótico, fue repescado por el Valencia un 31 de enero, quince días después de que Berizzo, su técnico en el Celta, lo apartara por indisciplina.

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