La afición del Valencia CF volvió a dar muestra de su fidelidad. Alrededor de 700 valencianistas acompañaron a los de Marcelino García Toral en el Benito Villamarín para vivir una cita tan importante como el partido de ida de las semifinales de la Copa del Rey. El 2-0 no apagó los ánimos de una afición que no dejó de alentar a su equipo hasta acabar empatando 2-2.
La expedición valencianista 'despegó' desde los aledaños de Mestalla a primera hora de la mañana y puso rumbo a Sevilla.Con la moral por las nubes y la ilusión por bandera, los seguidores valencianista que optaron por viajar en los buses fletados por el Valencia CF y la Agrupación de Peñas, sonreían a pesar del madrugón y las nueve horas de carretera que tienen por delante más otras tantas de vuelta al finalizar el partido. Fede Sagreras, presidente de la Agrupación, no se perdió detalle de la despedida.
Alrededor de 700 aficionados del Valencia CF acompañaron a los de Marcelino García Toral en el Villamarín para la ida de las semifinales de Copa del Rey
El grito de guerra elegido en esta ocasión es 'Volem la Copa' (Queremos la Copa), que corearon al unísono los 300 seguidores que adoptaron el bus como medio de transporte. Otros tantos, hasta completar las 671 entradas disponibles, optaron por el AVE o vehículos particulares para desplazarse hasta la capital.
Ese mismo grito de guerra fue el que se vivió ya en Sevilla. La numerosa representación de la afición del Valencia CF que se desplazó al Benito Villamarín se hizo notar. Primero con el caluroso recibimiento que le dedicaron a sus jugadores y después con su aliento desde la grada. Esos cánticos doblaron su fuerza desde que el Betis se adelantara en el marcador al filo del descanso con un gol de Loren Morón.
En la segunda mitad alcanzaron su mejor momento cuando Denis Cheryshev hizo el 2-1 para meter de nuevo al Valencia en la eliminatoria. Parejo, con los brazos en alto, celebró el tanto junto a sus aficionados.
La locura llegó con el 2-2 obra de Gameiro y al final del choque, cuando todos juntos celebraron el triunfo.
Las semifinales de la Copa del Rey son una cita importante y la siempre fiel afición del Valencia CF no podía fallar. Dio una nueva muestra de lealtad y de su capacidad para acompañar a su equipo hasta cualquier escenario del universo futbolístico.
La afición del Valencia CF contribuyó a que el Benito Villamarín registrara la mayor asistencia de su historia, con más de 57.213 espectadores.