Alfonso Gil
Valencia, 19 mar .- El entrenador del Valencia, Marcelino García Toral, ha conseguido en la actual temporada que su equipo sea mejor en defensa, con menos derrotas y goles recibidos que en la pasada, pero no ha logrado que crezca en ataque, pues ha ganado menos partidos y ha marcado menos goles que en la última campaña.
El técnico asturiano, que cumple su segunda temporada en el conjunto de Mestalla, ya ha dirigido al equipo este año en 46 partidos, los mismos que completó en toda la pasada campaña.
Hace un año el Valencia jugó 38 partidos de Liga y ocho de la Copa del Rey, pues no compitió en Europa, y se clasificó como cuarto en el torneo liguero para la Liga de Campeones.
Al mantenerse vivo en Europa, a estas alturas de la actual campaña y cuando quedan poco más de dos meses para su conclusión, el Valencia ya ha igualado los partidos del pasado ejercicio, con veintiocho de Liga, ocho de Copa del Rey y diez en competiciones continentales.
Ahora, al conjunto de Marcelino le restan un mínimo de trece encuentros oficiales, diez de Liga, dos de la Liga Europa ante el Villarreal y la final de Copa del Rey contra el Barcelona, a los que podría añadir tres más, si disputa las semifinales y la final de la Liga Europa.
La dinámica del Valencia ha cambiado notablemente respecto a la pasada campaña, en la que fue mejor en la primera mitad de la temporada, lo que le permitió consolidarse en la zona alta de la Liga.
Este año, en cambio, el inicio fue más dubitativo y la mejora se ha notado fundamentalmente a partir de Navidad, tal y como se demuestra en la circunstancia de no haber perdido ninguno de sus últimos quince partidos oficiales, en los que acumula ocho victorias y siete empates.
En comparación con el año pasado, el Valencia ha mejorado en la reducción del número de derrotas (doce frente a las ocho actuales) y la de goles recibidos, ocho menos, con 38 frente a los 46 de la campaña 2017-2018.
Por el contrario, ha empeorado por el descenso del número de triunfos, con dieciocho victorias hasta el momento frente a las veintiséis del anterior ejercicio.
Peor es el balance de goles marcados, pues entonces fueron 79 y ahora el Valencia solo ha marcado 55, lo que supone veinticuatro menos.
El Valencia marca menos y encaja menos. Por ello, sus partidos en la actual temporada ofrecen menos tantos al espectador que en el pasado ejercicio, cuando hubo más de un festival de goles en partidos disputados por el Valencia, entre los que destacó el inusual 3-6 conseguido ante el Betis en el Benito Villamarín.
Sin embargo, la principal característica del Valencia de este año es la propensión al empate, pues ha igualado veinte de los 46 encuentros disputados (un 43 por ciento del total), dieciséis de ellos en Liga, lo que le ha convertido en el equipo con más igualadas del campeonato.
Con esta dinámica, el equipo afronta el tramo final de la Liga en séptima posición y con aspiraciones de mejorarla, dispuesto a pelear con el Villarreal por un puesto en la semifinal de la Liga Europa y con el sueño de alcanzar el título de Copa del Rey en el año de su centenario a pesar del potencial del Barcelona.