Cinco cosas que aprendimos del Sporting-Valencia
El Valencia CF ganó al Sporting de Lisboa (1-2) y dejó buenas sensaciones tras su primer test serio de la pretemporada. Más reposadamente, tras el paso de las horas, ElDesmarque Valencia analiza cinco detalles, cinco lecciones que dejó el encuentro y que merecen un análisis más reposado al margen de la crisis social que se ha generado tras las desavenencias entre Peter Lim y Mateu Alemany.
El azul mola
El equipo estrenó la tercera equipación, apenas unos días después de anunciarla. Tributo a los años 90, la verdad es que es una imagen muy potente y a la que estaba poco acostumbrado el aficionado valencianista. No en vano, el azul claro es un color que había desaparecido casi por completo de la memoria colectiva del valencianismo.
El Valencia CF a la contra es letal, el Sporting ya lo sabe
Entrando en materia futbolística, el sistema de Marcelino ha cambiado poco o nada, pero sigue siendo tan eficaz a la contra que, en cuanto le dan unos metros, desarbola a cualquier rival. El 1-2, obra de Gameiro, fue una nueva lección magistral de cómo efectuar una contra. Roba Coquelin, la cede a Cheryshev, este en profundidad a Rodrigo que, desmarcándose al espacio, la coge, corre, la pone y Gameiro llegando desde atrás remacha.
Con 1-2, el Valencia tuvo un par de contras más que bien podrían haber acabado en gol. Así es letal.
En defensa falta ajustarse
En defensa, es normal por las alturas de pretemporada y por los cambios en el encuentro, faltan todavía ajustar los mecanismos. En los centros laterales el equipo sufre en exceso. A la espalda llegó el primer gol del encuentro, que cierto es, resolvió Bas Dost con un misil imparable. Pero también hubo otros momentos en los que el equipo sufrió en exceso con las entradas por banda portuguesas.
Manu Vallejo tiene sitio
Dar nombres propios en partidos así es difícil, pero no es menos cierto que Manu Vallejo siempre que sale deja buenas sensaciones. Ante el Sporting pudo marcar a las primeras de cambio, pero se le vio combinar bien con sus compañeros, presionar con criterio y dejar cosas interesantes. Buen complemento para Maxi Gómez, Gameiro o Rodrigo.
Marcelino lo tiene claro
Al margen de Manu Vallejo, el técnico parece tener las cosas muy, muy clara. En Valencia dejó a Sobrino y Medrán, y a Fran Villalba, Racic y Javi Jiménez los dejó para los últimos minutos. ¿Jugaron? Sí, pero seguro que en una plantilla de 22-23 futbolistas no tienen hueco ninguno. Queda poco más de un mes para que se cierre el mercado y tres semanas para que empiece LaLiga y deben captar las señales del técnico.