Y después de Singapur, Rivero

Uno de los asuntos más urgentes a corto plazo en el Valencia CF pasa, con permiso de las ampliaciones de Carlos Soler, Kangin Lee o Ferran Torres, por la renovación del meta Cristian Rivero, que alterna el primer equipo con el filial. De hecho, es el tercer meta de Albert Celades.

El tercer portero del Valencia CF, héroe del filial ante el Villarreal B, Cristian Rivero, es a día de hoy la situación más urgente que tiene entre manos la dupla Anil Murthy - Jorge López, máximos responsables en la actualidad del área deportiva del club. El prometedor meta, sin duda una de las joyas de la cantera con permiso de los Kangin, Ferran Torres o Carlos Soler, acaba contrato el próximo mes de junio y el club quiere cerrar su renovación antes de que acabe el año.

En ese sentido, tal y como ha podido saber ElDesmarque Valencia, los contactos con el agente del futbolista son constantes y se espera que, tras el viaje a Singapur del presidente, que certificará la nueva reestructuración deportiva, sea el momento de que las partes se sienten y cierren una renovación que camina por una buena sintonía.

Y es que, las dos partes quieren ampliar su relación, manejan un contrato largo porque el joven meta tiene un prometedor futuro por delante y cuenta con el respaldo y el visto bueno de José Manuel Otxotorena, preparador de porteros del club y de la selección española. Es el vasco, una auténtica eminencia en la preparación de guardametas, el que ha bloqueado el interés de infinidad de clubs de LaLiga Smartbank que ya en verano quisieron llevárselo.

Quienes lo conocen aseguran que el meta de Gandía es similar a Vicent Guaita por sus características técnicas y físicas. Hasta la fecha es el tercer portero del primer equipo con el que ha disputado ya cuatro partidos amistosos. En las convocatorias entra cuando, como sucedió en Pamplona, hay alguna indisposición de Cillessen o Jaume Doménech, hasta la fecha los dos intocables para Celades como lo eran para Marcelino.

A pesar de eso, Rivero y su entorno están convencidos que, en el Valencia, a la sombra de un grande como Otxotorena y en un club como