Ezequiel Garay, jugador que el Valencia CF no decidió renovar tras lesionarse de gravedad en febrero del año pasado en una relación que acabó con polémica y cruce de comunicados, sigue sin equipo. A pesar de ser uno de los mejores jugadores del equipo campeón de Copa, el argentino sigue sondeando sus opciones antes de buscarse acomodo a sus 33 años. Ha sonado para varios equipos, el último de ellos el Boavista portugués.
El club luso, según informa A Bola, está montando un proyecto potente tras su alianza con el dueño del Lille y del Mouscron Gerard López y cuya principal novedad es Adil Rami, también exjugador del Valencia CF. De hecho, el sueño del club de la ciudad de Oporto sería juntar a ambos veteranos para reforzar su zaga.
Antes que los portugueses, a su puerta ha llamado el Elche de su compatriota Christian Bragarnik. El club ilicitano, cuyo máximo accionista es el mencionado empresario argentino, está reforzando el proyecto deportivo con albicelestes como el nuevo técnico Jorge Almirón, ex de clubes de su país como San Lorenzo, Lanús o Independiente, entre muchos otros. El técnico argentino ha recalado en Elche para sustituir a Pacheta.
Garay está sin equipo desde su marcha del Valencia CF y busca nuevos retos. Aunque se había especulado con la posibilidad de su regreso al Benfica, es el Boavista el último en posicionarse. El hecho de que pueda llegar gratis es un gran incentivo para el Elche y el propio futbolista no vería con malos ojos esta opción por Elche podría ser una gran plaza para reencontrarse consigo mismo tras superar una de las lesiones más graves que puede sufrir un futbolista, tal y como adelantó el diario As.