El 'president' de la Generalitat, Ximo Puig, ha insistido este lunes en que la desescalada será "prudente, muy prudente" en la Comunitat Valenciana, teniendo en cuenta las necesidades de los sectores afectados y sin "ninguna actitud impositiva en absoluto". "Desde luego, la desescalada va a ser prudente, muy prudente, porque no podemos volver atrás después de todo el esfuerzo de la sociedad valenciana", ha dicho en rueda de prensa a dos semanas de que finalice el plazo actual de restricciones, como el cierre total de la hostelería o el de las grandes ciudades los fines de semana.
Hasta entonces, Puig ha avanzado que durante estos 15 días se analizará la situación con los expertos de salud pública y "en contacto" con los sectores afectados para estudiar qué medidas se pueden tomar para mejorar su situación.
También ha recordado que los contagios se generan en todos los espacios donde hay contactos, no solo en bares y restaurantes, y ha reconocido el esfuerzo de "cada familia y negocio que tiene dificultades".
El president de la Generalitat, Ximo Puig, ha pedido este lunes "comprensión" a los hosteleros con las restricciones frente al coronavirus, y ha asegurado que entiende y "empatiza" con el "dolor y con el sufrimiento" de muchas personas que en estos momentos tienen "graves dificultades económicas".
Puig ha señalado a los medios de comunicación que la Generalitat tiene "absoluta" voluntad de diálogo con los sectores afectados y de compensar a aquellas economías que "lo están pasando francamente mal", para lo que han puesto en marcha el Plan Resistir, con más de 400 millones de euros.
"Si es necesario, continuaremos con una nueva edición de este Plan", ha asegurado Puig, quien ha apelado a "intentar trabajar juntos para salir juntos y rápidamente", y ha afirmado que la hostelería y el turismo serán una de las "vías de salida" de esta crisis económica y social, como lo fue en la crisis financiera.
Puig ha indicado que en los próximos quince días se estudiará desde la perspectiva de Salud Pública y también en contacto con los sectores qué decisiones se pueden tomar a medida que mejore la situación epidemiológica, aunque ha alertado: "Desde luego, la desescalada va a ser prudente, muy prudente".
"No podemos volver atrás después de todo el esfuerzo" de la sociedad valenciana, ha aseverado Puig, quien ha asegurado que este proceso se va a hacer "con diálogo con todos los sectores" y con "la máxima humildad posible, para no adoptar posiciones que sean negativas para parte de la población".
El president ha destacado que es necesario "tener claras las ideas", y en estos momentos "la idea fundamental es salvar vidas, para después también salvar empleos", y ha asegurado "con total franqueza" que el Consell no quiere "que haya ninguna restricción que no sea necesaria".
Ximo Puig ha explicado que "en estos momentos la idea fundamental es salvar vidas, para después también salvar empleos", y ha asegurado "con total franqueza" que el Consell no quiere "que haya ninguna restricción que no sea necesaria".
Ha insistido en que "la prioridad es la salud de las personas", y ha precisado que el problema no son tanto los espacios hosteleros, sino que a mayor movilidad hay más contactos y más contagios, y los contactos se producen no solo en los bares, sino en los propios domicilios.
"Es la restricción de los contactos lo que nos está haciendo avanzar y superar esta situación tan difícil que hemos vivido a principios de este año", ha asegurado el president, quien ha agregado: "Estamos mucho mejor que hace unas semanas, pero aún no estamos suficientemente bien".